González Pons, que dedicó gran parte de su intervención en el citado encuentro informativo a exhibir su “valencianía” y su “intención” y “compromiso” de defender los intereses valencianos -hasta el punto de sostener una naranja en el estrado, emulando la puesta en escena del diputado de Unión Valenciana Vicente González Lizondo 15 años atrás en el Congreso de los Diputados-, también tuvo tiempo para la política interna y atacó al proceso soberanista catalán y a los que el PP considera sus apoyos en la Comunidad Valenciana, con la mirada ya puesta en las próximas elecciones autonómicas de 2015.

Así, el candidato popular manifestó que “hay que evitar que se disperse el voto del PP en la Comunidad Valenciana entre fuerzas pequeñas que quieren ayudar, pero no pueden”.
 
“Debemos evitar que se favorezca que lleguen a la Generalitat valenciana gobiernos demasiado contemplativos o acomplejados ante el independentismo catalanista”.

Pons aseguró además que el independentismo catalán “puede acabar perjudicando política y económicamente a la Comunidad Valenciana, reabriendo inseguridades en nuestra izquierda y aislándonos geográficamente de Europa”.

En este punto, el candidato popular a los comicios europeos señaló que si hay consulta por la independencia de Cataluña, “necesitamos en la presidencia de la Generalitat Valenciana a alguien que se oponga al contagio”, y no a los “aplaudidores del catalanismo como Compromís o complacientes indiferentes como los del PSPV”, señaló Pons, que deslizó también una advertencia para espolear a los militantes y simpatizantes valencianos a ir a las urnas. “Si los independentistas catalanes votan más en estas elecciones, lo valencianos no podemos votar menos; nos jugamos mucho”, sentenció Pons.