López Garrido anuncia que España debatirá con Bélgica y Hungría el programa de su presidencia europea en 2010

El secretario de Estado para la Unión Europea en el Fórum Europa

López Garrido anuncia que España debatirá con Bélgica y Hungría el programa de su presidencia europea en 2010

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MADRID, 21 de noviembre. El secretario de Estado para la Unión Europea, Diego López Garrido, anunció hoy que el Gobierno español tiene ultimado el programa de su próxima presidencia de la Unión Europea de 2010. La propuesta provisional se debatirá el próximo 15 de enero en Budapest en una reunión a la que asistirán Bélgica y Hungria, los países que serán responsables de la presidencia antes y después que España.

El objetivo del Gobierno español es que a partir de ahora la presidencia de la UE no se circunscriba a los meses de le corresponda a cada país, sino que se diriga la Unión por equipos que den una continuidad al proyecto europeo, según dijo López Garrido en el Fórum Europa, organizado por Nueva Economía Fórum.

Para ello, el Gobierno español ya esta buscando la "complicidad" del resto de países con la vista puesta en desarrollar una presidencia "muy cercana" a la ciudadanía, "muy social" y que impulse la consolidación de la Unión.

El objetivo del Gobierno es hacer la política de "un gran país" durante su semestre de presidencia. En este sentido, señaló que, de los países que presidirán la UE entre los años 2010 y 2014, España será el único que se haya sentado en la cumbre de Washington.

López Garrido explicó que a España le tocará poner en marcha la aplicación del Tratado de Lisboa y se mostró confiado en que Irlanda sea sensible a la necesidad de repetir el referendum sobre la constitución europea antes de la entrada en vigor del Tratado, que supondría la pérdida de peso en el Parlamento para España.

También se refirió a la tarea del grupo de sabios, recién nombrado, que encabeza Felipe González, del que dijo que tratará de dibujar el "rumbo" de la UE a 20 años vista. Sus conclusiones se conocerán en 2010, justo durante la presidencia española.

"Europa necesita fijar bien su rumbo. Un rumbo equivocado nos llevará al desastre", en cambio si hay una hoja de ruta bien diseñada, aunque se avance lentamente cada vez "estaremos más cerca de nuestros objetivos".

MULTIPOLARISMO

Según López Garrido, entramos en la época del "multipolarismo" que va a definir la frontera entre el siglo XX y el siglo XXI. En este nuevo escenario, la Unión Europea está demostrando "capacidad de liderazgo".

Esa capacidad se plasma en su iniciativa ante la crisis económica y en la constatación de que ha sido la Unión Europea la que "ha evitado el colapso" del sistema financiero internacional.

Otra de las lecturas que saca Garrido de la crisis es que la cumbre del G-20 ampliado ha acabado con la relevancia del G-8, que es una estructura creada en el pasado siglo XX.

Dentro de este papel emergente de la Unión Europea, España tiene un papel preponderante, según López Garrido. Su nueva posición como actor internacional ha quedado plasmada en dos acontecimientos: la designación de Barcelona como sede del foro Euromediterráneo y la participación de Zapatero en la cumbre de Washington.

RELACIÓN CON EEUU

López Garrido se refirió a los contacos que está manteniendo en estos días el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, con la que será la futura administración de Barak Obama.

El secretario de Estado aseguró que Moratinos está muy satisfecho del resultado de sus gestiones y vaticinó que las relaciones entre ambos países serán "espléndidas". Reconoció que a ello ayuda el hecho de que España vaya a ser presidente de la UE en 2010.

En todo caso, puntualizó que no se puede esperar de Obama ponga los intereses de Europa por delante los de Estados Unidos. "Obama no va a pensar en primer lugar en los intereses europeos, él defenderá los de Estados Unidos".

Sabe, sin embargo, que la política de decisiones unilaterales, la desrregulación financiera y las acciones preventivas desarrolladas por Administración Bush ha dejado a Estados Unidos en situación de "debilidad" y él quiere "seguir siendo el ‘number one’" y para eso necesita "alianzas con otros países" y en especial con sus socios preferentes de la Unión Europea.