Así lo aseveró durante el encuentro informativo organizado por Nueva Economía Fórum, en el que fue presentado por el embajador de España Representante Permanente ante la Unión Europea, Marcos Alonso.
 
Jaume Duch señaló que , tras la reciente instauración del ‘marco de Windsor’ para sustituir al llamado ‘protocolo de Irlanda’ tras el Brexit, “el Reino Unido está empezando a darse cuenta de en qué situación se ha colocado él solo o lo colocaron quienes lo gobernaban en un momento determinado”.
 
“Lo que pasa es que hay procesos que efectivamente tienen mucho de irreversibilidad y uno de ellos puede ser éste”, dijo en alusión al Brexit. “Entre otras cosas porque yo creo que la Unión Europea también se ha acostumbrado a funcionar sin el Reino Unido y, bueno, eso tiene algunos inconvenientes, pero la verdad es que también tiene algunas ventajas”.
 
A este respecto, apuntó que “no lo sabemos y no lo sabremos nunca, pero habría sido muy interesante saber qué decisiones la Unión Europea habría podido tomar o no durante la crisis del covid, entre otras”, y añadió a esa duda “por ejemplo, no ya el tema de la vacunación, sino sobre todo la aprobación de un Plan de Recuperación de 750.000 millones de euros basado en la mutualización de la deuda a través de la Comisión Europea”.
 
“Yo no tengo la sensación de que hubiera sido un tema en el que el Reino Unido hubiese entrado fácilmente”, consideró el portavoz del Parlamento Europeo, y agregó que “en algunos ámbitos, no en todos, en algunos ámbitos, la salida del Reino Unido ha agilizado un poco, bastante, las cosas”.
 
MÁS PRAGMATISMO
 
No obstante, admitió que “hemos visto cómo en los últimos días, el Reino Unido vuelve a dar una serie de señales de acercamiento hacia la Unión Europea con el tema de la revisión del del protocolo sobre Irlanda” y dijo tener “la sensación de que empieza a aumentar el grado de pragmatismo” en el país.
 
Un pragmatismo, subrayó, “ que ha tardado mucho en llegar pero empieza a aumentar y esperemos que siga aumentando, porque hay muchas cosas que el Reino Unido y la Unión Europea pueden hacer juntos, no hace falta ser miembro de la Unión Europea para cooperar en muchos de sus programas” y tampoco hace falta ser miembro de la Unión Europea “para intensificar la relación en políticas como la seguridad o la defensa, o las políticas de cooperación científica o las políticas de movilidad juvenil”. “¿Qué sentido tiene en este momento que el tenga prohibidos a los jóvenes británicos participar en el Programa Erasmus?”, se preguntó Duch.
 
ACUERDO CON GIBRALTAR
 
Por otra parte, respecto al esperado acuerdo respecto de Gibraltar, Duch afirmó que “este tema está encaminado”, y señaló que primero hubo “la negociación bilateral entre España y el propio Reino Unido y a partir de esa negociación, digamos la trasposición de esas propuestas a la Comisión Europea, que es quien después tiene que negociarlas en nombre de la propia Unión”.
 
Duch subrayó que “una de las consecuencias de los acuerdos del llamémosle divorcio entre la Unión Europea y el Reino Unido es darle a España un papel mucho más importante y mucho más preponderante a la hora de decidir, exactamente, cuál va a ser la relación con Gibraltar”.
 
En su opinión, “las cosas están avanzando bien, y en el Parlamento hay en general satisfacción respecto a este tema”, por “la posibilidad de que en Gibraltar siga perteneciendo al espacio de Schengen, y que se protejan los derechos sociales de los más de 15.000 trabajadores españoles que atraviesan la línea todos los días”. Se trata de “un tema en el que precisamente el papel de la Unión Europea es un papel que empuja las cosas en la buena dirección”, concluyó.