Durante su participación en este acto informativo organizado en la capital por Nueva Economía Fórum, Ayuso explicó que, en este caso, en el que al menos tres de las diez chicas liberadas por la Policía Nacional al desarticular una banda que las explotaba sexualmente vivían en estos centros, las menores son personas "con unas vidas muy desgraciadas".

Manifestó que espera "que este debate salga pronto de la política" y destacó que estas niñas "han sido incluso prostituidas por sus propios padres y que, en algunos casos, incluso tienen órdenes de alejamiento de los mismos por maltrato".

"Son niños que después ni siquiera acuden a clase, que una vez salen de nuestros centros no pueden ni siquiera retomar una vida medianamente normal por las circunstancias en las que ellos mismos están", señaló.

Ayuso dijo que estos hechos son "muy diferentes" de los que se han dado "en otras ocasiones", en alusión a lo ocurrido en Baleares, porque "no se han producido nunca en centros de la Comunidad ni a manos de ninguno de sus profesionales".

Indicó que "estamos colaborando con la Policía y lo que hacemos es ayudarla con toda la información que nos van requiriendo y la que la propia Policía nos va suministrando a nosotros, que no siempre tenemos".

Explicó que actuar es "muy complicado" porque se ofrece tutelaje cuando están en centros de la Comunidad pero "una vez que salen sus vidas son muy complicadas".