Respalda la "apuesta valiente" de sustituir a San Gil y marcar una nueva línea política

Arantza Quiroga en el Fórum Europa

Respalda la "apuesta valiente" de sustituir a San Gil y marcar una nueva línea política

Con el patrocinio de Asisa, BT y Red Eléctrica de España

MADRID, 18 de mayo. La presidenta del Parlamento del País Vasco, Arantza Quiroga, ensalzó hoy la "apuesta valiente" que la dirección nacional del Partido Popular hizo hace un año al sustituir a María San Gil y marcar una nueva línea política dirigida por Antonio Basagoiti.

Quiroga participó en un desayuno informativo del Fórum Europa, organizado por Nueva Economía Fórum, en el que estuvo arropada por la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal; y por el presidente del Congreso, José Bono, entre otros. El líder de los populares, Mariano Rajoy, también acudió al hotel donde se celebraba el acto para saludar personalmente a Quiroga, pero no se quedó a la posterior conferencia.

Las primeras palabras de Quiroga fueron para alabar la decisión que la dirección nacional del PP tomó hace un año de renovar la cúpula del Partido Popular del País Vasco tras la renuncia a María San Gil a repetir en el cargo por discrepancias con la nueva estrategia de oposición fijada por Rajoy.

Quiroga destacó que aquella fue una "apuesta valiente" que permitió poner en marcha una nueva línea política que ahora ha facilitado el cambio político en Euskadi y que ha permitido al Partido Popular hacerse con la Presidencia del Parlamento de Vitoria.

A su juicio, este logro ha sido posible gracias al trabajo durante años "de muchas personas anónimas" en el PP del País Vasco, pero subrayó que "ese éxito no hubiera sido posible sin el concurso" de la dirección nacional del partido, con Rajoy y Cospedal a la cabeza.

Quiroga pronunció estas palabras delante de Cospedal, pero también de importantes ex dirigentes del PP vasco como Carlos Iturgáiz y de destacados miembros de la anterior cúpula del PP nacional, como Ignacio Astarloa, gran amigo personal de María San Gil.
 
LA "PATALETA" DEL PNV
Durante su intervención antre la tribuna del Fórum Europa, Quiroga describió el pacto entre populares y socialistas para el nuevo gobierno vasco como el "GPS" que debe marcar la hoja de ruta del cambio político en Euskadi.

"Hemos firmado un acuerdo y ese acuerdo es el GPS y, en tanto se vaya en esa dirección, el PP será leal con ese gobierno; pero también es un acuerdo de manos libres, el nuevo lehendakari puede buscar los acuerdos que considere oportunos", dijo.

Quiroga admitió que el PSE pueda pactar algunas políticas con el Partido Nacionalista Vasco, incluso aseguró que sería "deseable" porque eso supondría que abandona "la pataleta en la que está" tras haber perdido el gobierno autonómico.

La presidenta del Parlamento Vasco intentó meterse en la piel de los dirigentes peneuvistas y admitió que "es una situación dura perder el poder y pasar a la oposición", pero deseó que el PNV "más pronto que tarde asuma la nueva situación".

EL CAMBIO EN ÁLAVA
Pese a estas posibilidades de entendimiento entre el PSE y el PNV, Quiroga pidió llevar el cambio a otras instituciones como la Diputación de Álava, ya que considera que "es bueno que haya una alternancia y una alternativa a las políticas nacionalistas".

Explicó que "el mismo espíritu que nos ha movido a apoyar a Patxi López es el mismo que nos mueve para tratar de que en Álava ocurra lo mismo" y recalcó que el cambio "también debe ser posible" en la Diputación Foral de esta provincia, tradicionalmente gobernada por el Partido Popular durante la última década y que ahora está en manos del PNV.

Asimismo, la presidenta del Parlamento del País Vasco confió en que esta institución sirva para resolver la crisis económica mediante la aprobación de nuevas leyes y de los presupuestos de la comunidad para el próximo año.

Quiroga celebró que la Cámara vasca es "plenamente democrática por primera vez" en la historia porque no hay ningún representante político de los terroristas y "no hay ni un solo partido que defienda las tesis de ETA".

En su opinión, el Parlamento vasco debe servir esta legislatura para "levantar la voz frente a los silencios y las autocensuras" que durante mucho tiempo han frenado la lucha policial, política y social contra los terroristas y sus cómplices.