En cuanto a la solidaridad territorial, el consejero señaló que hay una cierta utilización abusiva de los fondos públicos con un modelo fiscal liberal y un Estado del Bienestar “nórdico” frente a regiones como Cataluña, con una fuerte presión fiscal y un Estado del bienestar mediterráneo.

“Cooperar es una cosa, expoliar es otra”, sentenció. Además, dijo que, con Jordi Pujol como presidente de la Generalitat, se aplicó la filosofía de “primero cojo el dinero y el modelo no me importa”.

Asimismo, se preguntó “hasta cuándo mantendremos un modelo unificado de gestión entre los aeropuertos españoles” cuando en Europa cada aeropuerto es una empresa que debe aplicarse y competir con otras empresas.

El consejero catalán se preguntó por qué no puede haber competencia entre las propias comunidades que conforman el Estado como ocurre en EEUU y Alemania y añadió que ahora que hay crisis y que vuelven los valores del esfuerzo y de la constancia deben aplicarse a las regiones.

Por otra parte, señaló que Cataluña sigue teniendo una sociedad abierta, multiétnica, multilingüística y agnóstica en cuanto al sentido de ciudadanía.

En cuanto a la Administración y la estructura territorial dijo que “estamos en un momento” en el que se cuestiona si el Estado autonómico es eficiente o no y si es válido para lo que pueda venir tras la crisis económica.

“Somos razonablemente optimistas ante la crisis si pactamos en materia de innovación, inmigración e integración”, añadió. “Las autonomías han sido una bendición para España”, sentenció el consejero.