Lo anunció durante su intervención ante el Fórum Europa, organizado por Nueva Economía Fórum, al exponer las medidas de regeneración democrática que defiende el PSOE.

Subrayó que está cumpliendo su compromiso de transparencia con la publicación de las cuentas del partido y “en los próximos días” con las declaraciones de bienes de los miembros de la dirección.

Además, está abriendo el partido a asambleas en las que pueden participar los ciudadanos, y mantienen el compromiso con la elección de los candidatos por las bases.

Junto a todo ello, anunció que el PSOE presentará una iniciativa parlamentaria para que diputados y senadores ejerzan con exclusividad la tarea de representar a los ciudadanos, ampliando las incompatibilidades para que no puedan desempeñar actividades privadas que “nada tienen que ver” con esa tarea pública.

Por las actividades que sí sean compatibles porque estén relacionadas con su labor como parlamentarios, como puede ser colaborar con un medio de comunicación, no podrán recibir ninguna retribución.

No puede ser, sentenció, que los parlamentarios representen a los ciudadanos “en sus ratos libres” y dediquen parte de sus esfuerzos a otras labores.

Su compromiso es “firme”, aseguró, y si los demás partidos no están de acuerdo pedirá a los socialistas que lo apliquen “en primera persona”.

Entre las medidas defendidas por el PSOE, está también la exigencia a altos cargos y parlamentarios de presentar un certificado de Hacienda que demuestre que están al corriente de sus obligaciones fiscales y que determine el patrimonio.

Ese certificado fiscal deberían presentarlo al comienzo y al final de los mandatos para dejar constancia de las variaciones patrimoniales.

Sánchez argumentó que mejorar la sociedad exige “mejorar nosotros mismos” y limpiar la actividad política “de toda duda, de toda sospecha”.

También pedirán “castigo ejemplar” para los condenados por corrupción y que respondan con su patrimonio en caso de haberse lucrado de forma irregular, incluso con el que hubieran ocultado poniéndolo a nombre de terceros.

Por eso mismo, explicó, el PSOE ha instado a la Fiscalía a actuar ante el ex presidente de la Generalitat de Cataluña Jordi Pujol, para aclarar el caso “hasta las últimas consecuencias”.

Se comprometió, además, a que cuando sea presidente “las puertas giratorias se cerrarán”, pero preguntado por el caso de Felipe González subrayó que las leyes no pueden ser retroactivas.

Aseguró también que será “muy contundente” ante los militantes del PSOE de quienes se demuestre un uso irregular de las tarjetas en negro de Caja Madrid, en su caso tendrán que devolver el dinero y serían expulsados del partido.

Sobre Manuel Chaves y José Antonio Griñán subrayó que aún no están siquiera imputados en el caso de los ERE fraudulentos, y aseguró que se siente “muy identificado” con las medidas contra la corrupción tomadas por la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz.

”Me repugna la corrupción”, reiteró, más aún cuando afecta al PSOE, y por eso será “implacable” con quien incurra en esos delitos, “se llame como se llame y se apellide como se apellide”. Cuando un tribunal aprecie “actos que puedan ser considerados como delictivos, el PSOE actuará con la máxima contundencia”.

En el caso de Alberto Ruiz-Gallardón, cree que las instituciones deben “reconocer” a quienes han ocupado las máximas responsabilidades, tanto en el caso de un presidente del Gobierno como en el caso de presidentes autonómicos, y mencionó también al socialista Joaquín Leguina.

Sin embargo, reconoció que se sintió “desagradablemente sorprendido” al saber que Gallardón cobrará 8.500 euros al mes por acudir a una reunión semanal, y sentenció que eso “tiene que ser revisado”.

Subrayó que en menos de cien días como secretario general del PSOE ha reconocido más errores que Rajoy desde que es presidente del Gobierno, y espera “que alguna vez se disculpe mirando a los ojos de los ciudadanos que le votaron” por el incumplimiento de su programa y por casos como ‘Gürtel´.