Así lo señaló durante el encuentro informativo organizado por Nueva Economía Fórum en el que resaltó la necesidad de “dar músculo” al ecosistema de innovación presente en el País Vasco con el objetivo de “crecer y suportar el riesgo y los errores” que se puedan dar, así como incorporar “a las generaciones futuras” para así convertir a Euskadi “en un ecosistema de referencia a nivel europeo”.

De esta forma, Salaverria indicó como una de las principales apuestas a realizar en materia de innovación la captación y desarrollo de talento, para lo que apuntó que “es importante educar en innovación desde edades tempranas” y abogó por, siguiendo el ejemplo de los países nórdicos, incluir asignaturas de innovación en los programas educativos ya desde la educación primaria y secundaria.

En este sentido también se refirió a la importancia de continuar con las acciones para inculcar a los jóvenes el gusto por la ciencia, la tecnología y la innovación, así cómo formar en innovación en todas las carreras, y no solo en las de ciencia o en las ingenierías.

En segundo lugar, el presidente de Innobasque subrayó la necesidad de fomentar la innovación entre las pymes, ya que son “la base de nuestro tejido industrial”. A este respecto, consideró “espeluznante” que el 46% de las pymes vascas afirmen que no innovan porque no lo consideran necesario.

En tercer lugar, Salaverria señaló como otra apuesta a realizar la “sensibilización y socialización de la innovación”, de manera que se transmita a la sociedad “la importancia del momento que estamos viviendo” y “la necesidad imperiosa de innovar”, acercando a la sociedad a dicho proceso y haciéndola partícipe para así “ser agitadores de la innovación”.

Por otro lado, también destacó la importancia de “adentrarnos en el mundo de la innovación disruptiva”, siendo “un mundo desconocido y de riesgo”, para así “poder aprovechar las oportunidades que las nuevas tecnologías nos están brindando”.

Por último, el presidente de Innobasque habló de la necesidad de “consolidar la relación del mundo financiero con el ecosistema de innovación”, ya que “innovar requiere hacer I+D, comprar tecnología, desarrollar infraestructuras, tener fuerza para poder crecer… y todo eso necesita capital”.

En esta línea, afirmó que “parece que en Euskadi se empieza a configurar un sistema financiero de apoyo a la innovación y al crecimiento de nuestras empresas”, pero incidió en que “tenemos que seguir trabajando por una consolidación de la relación de ese mundo” con medidas y acciones que faciliten su entrada, por ejemplo, “con una fiscalidad adecuada”.

15 AÑOS DE INNOBASQUE

Por otra parte, Salaverria recordó que en julio Innobasque cumplirá 15 años y destacó que “en todo este tiempo” la entidad “ha evolucionado conforme a evolucionado el mundo, Euskadi y la innovación”.

Así, resaltó que “es importante la existencia de un agente que aglutine Euskadi alrededor de un compromiso con la innovación”, destacando a continuación que Innobasque cuenta actualmente con cerca de 1.000 asociados entre empresas, agentes de conocimiento, administraciones, agentes sociales y personas físicas.

Por ello, aseguró que Innobasque es “un foro donde lo público y lo privado reflexionen juntos y, sobre todo, actúan de manera conjunta”, con el fin de cumplir con su objetivo de que Euskadi “se pueda situar entre las regiones más innovadoras de Europa”.

En este sentido, apuntó que el Plan Estratégico para el periodo 2021-2024 de Innobasque contempla cinco objetivos básicos entre los que se encuentran impulsar el I+D en las pymes; incrementar la presencia del I+D vasca a nivel internacional; fomentar el interés de los jóvenes por la ciencia y la tecnología; dotar al sistema vasco de herramientas avanzadas de planificación, monitorización y de gestión; y ser un laboratorio de experimentación de impulso de la innovación.

Por otro lado, Salaverria afirmó que “es indiscutible que en Euskadi hay un ecosistema de innovación” que, en su opinión, “parte de valores intrínsecos a la cultura vasca y la cultura empresarial vasca, de coraje, valentía, de cohesión, de visión y compromiso, que quizás adquiere una forma identificable en los años 80”.

Por último, apuntó que, mediante la innovación, “Euskadi tiene que transicionar de ser fabricante de componentes a ser referentes en el mundo de la movilidad; transicionar de tener buenas empresas energéticas a ser referentes en sostenibilidad; transicionar de tener buenos restaurantes a ser excelentes en las tecnologías relacionadas con la alimentación”; y que “para eso tenemos que abordar esa nueva innovación tremendamente colectiva” mediante el impulso del sector privado y la ayuda del público.