Ahora, agregó, “si el máximo responsable del Gobierno dice que es antinuclear, ya vamos mal. No hay debate si partimos de prejuicios”.

El vicepresidente europeo lamentó una vez más el cierre de la central nuclear de Garoña, algo que considera “un error económico, medioambiental y social, porque se destruyen muchos puestos de trabajo”.

Según Vidal-Quadras, la Administración debe entender la vida útil de las centrales. “Se cometió un error con Garoña, porque estaba funcionando como un reloj. Esta central es una joyita y puede funcionar 10 años más perfectamente”, aseguró, para agregar que fue una decisión “populista, electoralista y bananera”.

Durante su participación en el citado encuentro informativo, organizado en Barcelona por Nueva Economía Fórum, el vicepresidente del Parlamento Europeo aseguró que la política energética se ha convertido en eje prioritario de la Estrategia 2020 de la Unión Europea y un factor también decisivo para salir de la crisis económica.

”Antes era un capítulo más de las políticas de la Unión y ahora es un eje prioritario, y esto lo debemos a la ex ministra y ex vicepresidenta de la Comisión Europea Loyola de Palacio, que impulsó el primer libro verde”, dijo.

OBJETIVOS 2020

Para Vidal-Quadras, la Unión Europea tiene que poner el énfasis en la creación de riqueza y “después podrá invertir en los proyectos sociales. Si se invierten los términos no va bien”.

La estrategia europea para conseguir objetivos para el año 2020, por ejemplo, propugna la construcción de infraestructuras y acabar con las islas energéticas como la península ibérica.

En este sentido, el vicepresidente europeo dijo que “los gobiernos tienen que entender que si los ciudadanos tienen que utilizar la energía de forma racional, tienen que olvidarse de las elecciones y de los populismos”.

La Estrategia 2020, un documento estratégico de la comisión energética y ecológica, se plantea cinco objetivos: el 75% de la población de 20 a 64 años de edad deberá tener empleo, el 3% del PIB de la UE deberá invertirse en I+D, se alcanzarán los objetivos “20/20/20” en el ámbito del clima y la energía, la tasa de abandono escolar deberá ser inferior al 10% y por lo menos el 40% de los jóvenes deberá tener cualificación o un diploma, y habrá 20 millones de personas menos expuestas al riesgo de la pobreza.

Vidal-Quadras confía en que se consigan estos objetivos. “Esperemos que esta vez, espoleados por la crisis, el cumplimiento de estos objetivos sea mejor que el de la Agenda de Lisboa, cuyos objetivos fueron bastante decepcionantes”, manifestó.