En este sentido, tras manifestarse a favor de un proceso de diálogo con la banda terrorista si deja las armas, como establecía la resolución de la Cámara Baja, la presidenta del Parlamento vasco relató que hace poco un joven se le acercó en las fiestas de su localidad y le dijo que tenía 24 años y su padre llevaba 22 años en la cárcel.

   La diputada del PNV aseguró que no quería hacer "valoraciones políticas" de este episodio, pero señaló que, aunque haya quien piense que el padre de este joven "algo hizo"

para estar en prisión, "el resultado y la conclusión es que esa imagen de ese chico que tiene 24 años es también un reflejo del sufrimiento de la sociedad vasca".

AUTOBÚS DE VÍCTIMAS

   A este respecto, Bilbao añadió que "los que más sufrimos y más necesitados estamos de conseguir la paz somos la sociedad vasca, que tenemos que convivir con esos sufrimientos teniendo claro que no aceptamos ninguna violencia, pero tenemos necesidad de superar esa situación".

   Asimismo, la presidenta de la Cámara vasca defendió el acercamiento de los presos de ETA a cárceles vascas y que exista una "manera más económica" para que los familiares de estos reclusos puedan desplazarse a las prisiones.

   Además, Bilbao cuestionó la iniciativa de la AVT de que un "autobús de víctimas" haya recorrido cementerios de toda España para recordar a los asesinados, ya que esto es algo que no comparten todos los afectados de acciones terroristas.

   Por otra parte, la parlamentaria peneuvista hizo referencia al envío a las Cortes de la propuesta de reforma del Estatuto catalán y aseguró que esta iniciativa tiene en común con el "plan Ibarretxe" la "voluntad social" en Cataluña y el País Vasco "de superar la realidad política actual".

   Añadió que las suspicacias que también está suscitando la iniciativa de reforma del Estatuto catalán, a pesar de que fue aprobada por el 90 por ciento del Parlamento de esta comunidad, prueba con el "plan Ibarretxe" no había un problema de falta de apoyo político, sino un "problema de fondo" a la hora de aceptar determinados cambios.

   En todo caso, Bilbao argumentó que las propuestas de reforma de los estatutos catalán y vasco evidencian que hace falta una "profunda reforma" de la configuración del Estado, que debe ir "más allá de cambios en leyes y normas concretas".