Ambos especialistas estuvieron de acuerdo en que los dos grandes partidos han sido los más favorecidos en los comicios del 9 marzo, tal y como queda demostrado al comprobar que, entre los dos, acumulan el 92 por ciento de los escaños en el Congreso de los Diputados.

La próxima legislatura "no va a ser más fácil" para el PSOE, coincidieron, pues si bien ha aumentado en número de votos, no ha logrado despegarse en escaños del PP y además "ha perdido recursos ajenos" para equilibrar fuerzas en el Parlamento, por el acusado descalabro de IU y los partidos nacionalistas, a excepción de CiU y PNV, según explicó Arango.

El que fuera director del CIS señaló que en adelante "cambiarán el sistema de partidos" puesto que la relación de fuerzas resultante de las elecciones consagra la política a dos bandas.

Según Arango, el PSOE ha perdido votos en las zonas "españolistas", donde el PP se ha consolidado demostrando, además, que "no le perjudica un alto nivel de participación". A su juicio, los populares han "sembrado vientos" en la pasada legislatura, que en algunos sitios han servido de "fertilizante del voto", mientras que en otros han "recogido tempestades".

Ahora es decisivo saber si va a persistir en un modelo de oposición agresiva y la primera prueba en la que el PP tendrá que demostrar su talante será en la renovación de órganos institucionales como el Consejo General del Poder Judicial, que está pendiente desde la pasada legislatura.

Por su parte, Wert consideró que, mientras los votos que gana el PP se los arranca el PSOE en los territorios en los que crece, los socialistas obtienen mejores resultados a costa del crecimiento de la abstención del electorado nacionalista y de IU.

Además, rechazó el argumento usado durante la campaña de que el voto del PP es un voto de extrema derecha. "No entiendo que los votos arrebatados al PSOE puedan ser votos de la extrema derecha", aseguró.

En cuanto al descalabro de IU, Arango aseguró que esta formación ha sido barrida por el "tsunami bipartidista" y que su caída ha sido de tal magnitud que incluso hay que preguntarse por su continuidad en el futuro.

UN MILLÓN DE VOTOS DE IU

En la misma línea se expresó Wert quien dijo no tener noticias de segundas resurrecciones políticas, y en el caso de IU un resurgimiento sería una "segunda resurrección" a semejanza de la que protagonizó en 1989. En todo caso, su desaparición es "muy importante" porque deja un millón de votos libres por los que tendrán que competir el resto de partidos.

Según Arango, a IU le ha perjudicado además el carácter nacional de estas elecciones en las que los ciudadanos han preferido optar por el voto "a la contra", es decir, aquel que puede impedir que gane el contrario.

Explicó que el electorado español es más bien "conservador", poco dado a "avalar aventuras" y decidido a retirar la confianza a aquellos partidos que "no se asientan sobre bases sólidas".

Este último argumento explica también la debacle de ERC, que tiene un voto "volátil" y que ha "malgastado" la situación "idílica" de la pasada legislatura con una "política extraordinariamente errática".

Por su parte, Wert consideró que Esquerra estaba sobrerrepresentada en la anterior legislatura y que con estos resultados "vuelve a niveles normales".

Sobre la entrada de Rosa Díez en el Congreso, Wert destacó que prácticamente todo su apoyo lo consigue en "caladeros del PP en Madrid", mientras que Arango aseguró que ahora queda ver "en el Congreso su verdadera personalidad para comprobar si su presencia se consolida o es efímera".