Durante el este encuentro informativo organizado en Barcelona por Nueva Economía Fórum, el candidato socialista explicó que “haremos un ejercicio de recuperación de la memoria histórica del parque, uniéndolo a sus orígenes de la Exposición Universal y, a su vez, abriéndolo a nuevos equipamientos y haciendo reformas que permitan la consolidación del actual ecosistema del conocimiento que rodea el parque".
 
Collboni denunció que actualmente el parque, que rodea el Parlamento de Cataluña, está en una situación “prácticamente de abandono”. Como prueba, denunció uno de los espacios emblemáticos del parque, el Invernadero, está cerrado por obras desde el año 2016 y el castillo dels Tres Dragons se encuentra también parcialmente clausurado al público.
 
Collboni manifestó que la propuesta de reformar el Parc de la Ciutadella es un proyecto que se planteó en círculos socialistas en el año 2017. Detalló que entonces “el poeta y gestor cultural barcelonès Jordi Carrió lideró la necesidad de volver a concebir la Ciutadella como un polo científico de la ciudad y el tiempo ha ido situando alrededor del mismo parque, de forma casi espontánea, instituciones públicas y privadas dedicadas a la investigación, como la universidad Pompeu Fabra, la Barcelona Graduate School of Economics, la Fundación Pasqual Maragall Alzheimer Internacional o el Centro de Regulación Genómica".
 
Paralelamente a la reforma del parque de la Ciutadella, Collboni defendió la continuidad del histórico zoo de Barcelona como centro de interpretación y divulgación científica y también la restructuración, ordenación y saneamiento del litoral barcelonés que respete un determinado modelo turístico de la ciudad.
 
A su juicio, “tenemos que hacer que los barceloneses vivan también vinculados al mar y "convertir la ciencia en una propuesta cívica para la ciudad". Collboni aseguró que el Partido Socialista quiere "una Barcelona sostenible y que aprovecha la transición ecológica para generar valor añadido".
 
También detalló que en 2016 el 90% de la población urbana mundial estaba sometida a niveles de contaminación superiores a los que establece la Organización Mundial de la Salud (OMS), y ello fue causa de 4,2 millones de muertos en todo el planeta. En Barcelona, se registraron en concreto 347 muertes relacionadas con la mala calidad del aire y se registran episodios de contaminación un total de 10 días al año. Así pues, "hace falta que las ciudades se conviertan en instrumentos fundamentales para el cambio de modelo económico y ecológico que necesita el planeta y Barcelona puede jugar este papel de capital mundial en la lucha contra el cambio climático".