Durante su intervención en el citado encuentro informativo organizado en Sevilla por Nueva Economía Fórum, Márquez advirtió de que en las próximas dos décadas “se van a producir profundas transformaciones en las ciudades desde el punto de visto de la energía, la movilidad, las comunicaciones y el ahorro de recursos naturales, entre otras, y son los ayuntamientos los que liderarán los cambios”.

A juicio del alcalde, en materia de economía circular, subyace una conciencia individual y un compromiso social que lideran las ciudades y no las comunidades autónomas ni los gobiernos nacionales.

Explicó que “nos acercamos a un cambio de modelo de sociedad, donde los alcaldes deben liderar las estrategias de adaptación con proyectos de ciudad en un plazo de ocho años como mínimo”.

En este punto, citó la necesidad de redactar y desarrollar Planes Generales de Ordenación Urbana (PGOU) acordes con dichos proyectos de ciudad y que se apliquen medidas que resuelvan retos relacionados con la contaminación, el medio ambiente, la movilidad del tráfico y la reutilización de los residuos, para lo que consideró fundamental el uso de las tecnologías.

Márquez destacó la labor que algunos ayuntamientos están desarrollando en asuntos claves como el cambio climático y puso como ejemplo la ciudad de Sevilla, desde la que ha surgido, hace unos meses, la Declaración por la Economía Circular y a la que se han adherido hasta el momento más de 700 ciudades.

Los ayuntamientos “debemos elaborar estrategias de implantación de nuevos servicios acordes con la economía sostenible, dirigidos a la eficacia y al ahorro”, señaló. Según el alcalde jiennense este cambio en la sociedad debe ir acompañado de modificaciones en el sistema y de tipo legislativo, “lo que no estará exento de tensiones, puesto que hay mucha resistencia a esa transformación”.

Según Márquez, para poner en marcha estas estrategias que conduzcan a un cambio de modelo, se necesita financiación, pero “desgraciadamente no la tenemos. Los ayuntamientos, siempre hemos sido el patito feo de las administraciones”, apostilló. En este punto apostó por la coordinación en la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) y por el apoyo financiero de la Unión Europa para la transformación social que se avecina.