Así se pronunció durante su participación en el acto organizado por Nueva Economía Fórum, en el que manifestó su “preocupación” y “decepción” ante la decisión tomada por Trump.

Explicó que costó mucho esfuerzo que EEUU y China –países que producen el 40% de las emisiones de gases de efecto invernadero en el mundo- se sumaran al Acuerdo de París rubricado en 2015.

Subrayó que EEUU produce entre el 14% y el 15% de las emisiones mundiales, lo que le permitió aseverar que le resulta “alucinante” comprobar cómo Trump ha decidido situarse en “el lado equivocado de la historia” al retirar a su país del Acuerdo de París.

Ban Ki-moon dejó claro que la lucha contra el cambio climático “no se puede parar”, por lo que invitó a todos los actores concernidos a “subirse al tren”, ya que, si no se toman decisiones hoy, “nos arrepentiremos en el futuro”.

También comentó que “no habrá paz sin desarrollo sostenible”, “sin democracia”. Por ello, apeló a proteger los derechos humanos a partir de un “medio ambiente limpio” y una “economía fuerte”.

Ban Ki-moon agradeció a España su compromiso en la lucha contra el cambio climático y mostró su esperanza en que este país sea “generoso” con la labor de la ONU en esta materia después de haber superado los efectos de la crisis económica.

El ex secretario general de la ONU manifestó que en la lucha contra el cambio climático debe constituirse una “asociación tripartita” entre los gobiernos, las empresas y la sociedad civil y defendió que la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible es uno de los planes “más ambiciosos de la humanidad” para conseguir una paz y prosperidad “duradera”.

Por último, dijo que “da vergüenza” observar cómo se “desperdician” recursos como la comida, el agua o la energía.

Esto le permitió subrayar que una tercera parte de los alimentos que se producen van a la basura, lo que supone desperdiciar 940.000 millones de dólares.

“Esto es ridículo cuando mil millones de personas pasan hambre en el mundo”, remachó.