El presidente del RACC asegura que el vehículo privado irá despareciendo ‘’de forma progresiva’’
El presidente del RACC asegura que el vehículo privado irá despareciendo ‘’de forma progresiva’’

Durante este encuentro informativo, organizado de forma telemática por Nueva Economía Fórum, Mateu subrayó la necesidad de crear una ciudad sostenible ecológicamente, así como en el ámbito social y económico. También recalcó la necesidad de pensar en qué modelo de ciudad se quiere tener el día de mañana y en aprovechar las oportunidades de mejora para ello. ‘’Es posible que en el mundo vaya desapareciendo cualquier vehículo privado pero hay que hacerlo de forma progresiva para que la ciudadanía se vaya habituando’’, declaró.
Mateu también se refirió al concepto ‘‘urbanismo táctico’’ que algunas ciudades como Barcelona han aplicado para impulsar un modelo de movilidad que genere más espacios para los peatones y medios de transporte alternativos, pero incidió en que esta solución se ha aplicado "de forma precipitada y desorganizada’’.
Además, explicó que fue una medida provisional durante la pandemia que debe ser ‘’consensuada y planificada’’ con los sectores a los que afecta para que beneficie a todos. En este sentido, abogó por la eliminación de los bloques de hormigón que están situados en la calzada para facilitar la movilidad.
PEAJES URBANOS
Por otra parte, Josep Mateu indicó que los peajes en las proximidades de las ciudades son “elementos reguladores del tráfico” pero “hablar de peajes urbanos” es “precipitado”.
Además, el presidente del RACC apostó por flexibilizar el horario de las zonas de carga y descarga para facilitar la distribución de mercancías, que ha experimentado un crecimiento “exponencial” en los últimos años, para lo cual instó a las administraciones públicas a “escuchar” a los sectores afectados.
Otro aspecto de la movilidad urbana en el que incidió Mateu se refiere a las bicicletas, que copan actualmente entre un 3% y un 4% de los desplazamientos en Barcelona, lejos del 50% de Copenhague (Dinamarca).
No obstante, recalcó que la bicicleta urbana forma parte de la movilidad en la capital catalana y abogó por “un mínimo de normas” sobre la circulación de bicicletas y patinetes eléctricos para facilitar la convivencia en la ciudad.
Sobre el turismo, defendió el uso de aplicaciones para mejorar la experiencia en la ciudad de las personas que la visiten y ayudar a la recuperación de este sector.