Ahora que se alzan voces en contra de la privatización de esas empresas, Martín Villa recordó que ese proceso se inició bajo Gobierno de Felipe González y fue culminado por José María Aznar. En su opinión el proceso privatizador "fue bueno e impecable".

Durante su concreción "se movieron billones de pesetas", "no hubo discusión sobre intencionalidad política alguna y nadie advirtió ni la más mínima mancha" en su realización.

Sin embargo, reconoció más adelante, "hemos llegado a la paradoja" de que una vez privatizadas, empresas extranjeras participadas en todo o en parte por capital público intenten entrar en el accionariado de sociedades españolas de sectores estratégicos.

En ese sentido, dijo que habría habido que tener "más cuidado" de regular esas posibles entradas y abogó por una reforma de la ley de opas que impida que empresas públicas, que no pueden ser opadas a su vez, opten a comprar paquetes accionariales en estas compañías españolas.

Esa nueva normativa incluiría no sólo a empresas extranjeras sino también a las cajas de ahorro que son de titularidad pública.

Sólo con modificaciones restrictivas de esta naturaleza "algunos de estos despropósitos se habrían podido resolver", dijo. Martín Villa, que fue presidente de Endesa, recordó el intento fallido de fusión de la eléctrica con Iberdrola, y aseguró que de haberse constituido un gigante energético español de ese calibre "la situación (actual) hubiera sido radicalmente distinta".

Finalmente, aseguró no conocer ningún dato sobre el futuro de Sogecable y la plataforma Digital Plus, y en todo caso advirtió que de conocer algún detalle, no lo haría público.