Jiménez, sobre la cúpula de Barceló, afirma que España hizo esta apuesta "con todas las consecuencias"

Trinidad Jiménez en el Fórum Europa

Jiménez, sobre la cúpula de Barceló, afirma que España hizo esta apuesta "con todas las consecuencias"

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MADRID, 12 de noviembre. La secretaria de Estado para Iberoamérica, Trinidad Jiménez, afirmó hoy que España hizo "con todas las consecuencias" su apuesta por la reforma de la cúpula de la sala XX del Palacio de las Naciones en Ginebra, encargada al pintor mallorquín Miquel Barceló, y que "no hay conflicto" en cuanto al pago de la misma. En su participación en el Fórum Europa, organizado por Nueva Economía Fórum, Jiménez destacó que Barceló es un "gran pintor, un artista, que como tal tiene que responder a lo que su obra representa y a la repercusión que pueda tener en el mundo".

Acto seguido, añadió que "cuando España decidió hacer una apuesta como país de prestigio, de consolidación, de compromiso, con la reconstrucción de este gran proyecto lo hizo con todas las consecuencias".

Preguntada por el hecho, reconocido por el propio ministro de Exteriores de que parte de coste de la obra de Barceló, 500.000 euros salieron de los Fondos de Ayuda al Desarrollo, Jiménez se limitó a decir que "no tengo más que añadir" más allá de lo que ha explico el Ministerio de Asuntos Exteriores.

El Departamento de Miguel Ángel Moratinos justifica este hecho en que se trata de una aportación que se acoge al artículo 58 de la ley 42/2006 de 28 de diciembre de Presupuestos Generales del Estado de 2007, que dice que se establece como uno de los objetivos del Fondo de Ayuda al Desarrollo la financiación de las aportaciones españolas a organismos internacionales no financieros en el marco de las competencias del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación y que no se ha computado como ayuda al desarrollo.

Jiménez dice que no "ha habido tal conflicto" en cuanto al coste y de donde ha salido el dinero para presupuestar la cúpula de la futura sala de los Derechos Humanos y la Alianza de las Civilizaciones de la sede europea de Naciones Unidas en Ginebra (Suiza), decorada por el artista mallorquín Miquel Barceló.