En el acto, organizado por Nueva Economía Fórum en Málaga, Griñán expresó la alegría de presentar a su compañero, “un amigo” que siempre le ha caído muy bien y del que admira muchas cosas, como su capacidad, voluntad, compromiso y espíritu de superación.

En un tono cordial y de nostalgia, Griñán se remontó a 1996, cuando él era ministro y recibió en el Congreso a un grupo de jóvenes diputados, Heredia entre ellos, momento en el que se empezó a forjar su relación.

“Es un agonías”, bromeó Griñán, quien explicó que durante un curso político Heredia hizo el trabajo equivalente a 33 diputados medios, en relación al número de propuestas y críticas que planteó en el hemiciclo, por lo que reconoció que se trata de alguien que ya se ha convertido en parte del paisaje del Congreso, al que todo el mundo acude porque siempre está “bien informado”.

Le definió como un testimonio vivo de lo que está ocurriendo en Andalucía, “que sabe lo que cuesta alcanzar una meta” pero que siempre cuenta hasta diez antes de contradecir a alguien.

El presidente andaluz también demostró su “tranquilidad” al contar con Heredia como líder socialista en Málaga, “por su trayectoria y compromiso y porque sabe cuidar las raíces del partido”.