En este sentido, Maneiro opinó que Euskadi no necesita “planes de paz que hablen de Guerra Civil y defiendan la teoría del conflicto político”, sino que lo que hay que hacer es aplicar el Código Penal.

Además, tampoco considera necesarios planes que hablen del compromiso de la Ertzaintza con los derechos humanos, sino que es preciso “deslegitimizar las ideas totalitarias”. “Quienes necesitan un cursillo de tolerancia y derechos humanos no es la Ertzaintza, sino los cargos de Amaiur, Bildu y Sortu”, dijo.

Respecto al futuro Instituto de la Memoria, presentado por el Gobierno vasco, Maneiro cree que tal y como se plantea es más bien un “instituto de la desmemoria”, porque no se pueden mezclar las víctimas de ETA con “supuestas víctimas que no los son”.

Asimismo, el diputado de UPyD responsabilizó al PSE y al PNV de buscar, con la excusa de la mesa de negociación, un pacto que “garantice las cuotas de poder para salvaguardar sus intereses partidarios”.

MODELO DE ESTADO
Durante su intervención en el citado acto informativo, organizado en Bilbao por Nueva Economía Fórum y en el que fue presentado por la diputada nacional de UPyD Rosa Díez, Maneiro se mostró partidario de modificar el modelo de Estado a través de una reforma constitucional y consideró que ha llegado ya el momento para ello. En concreto, abogó por implantar un sistema federal.

Por otro lado, opinó que el problema que afecta actualmente a la clase política no tiene su origen en la política como tal, sino en el sectarismo político y en los grandes partidos políticos, que “quieren que todo siga como está”.

Por ello, el parlamentario vasco defendió la idea de acabar con el bipartidismo y con ese “pacto entre partidos viejos que sólo persiguen dejar las cosas tal y como están”. También se mostró partidario de las listas abiertas para regenerar la política.

CORRUPCIÓN
Por otro lado, opinó que es necesario luchar contra uno de los grandes problemas que afectan a España, como es la corrupción. Consideró que “corrupción” es, por ejemplo, el supuesto intento del Gobierno vasco de “vendernos la idea de que en los últimos años lo que ha habido aquí ha sido una especie de conflicto político, donde había algo así como dos bandos enfrentados”.

A su juicio, se está intentando falsear la historia, y dijo que “no hay más corrupción que confraternizar y sonreír ante quienes siguen justificando a ETA y elevar a los altares a pacificadores de salón o llamar personas muertas a quienes han sido asesinadas”.

Asimismo, acusó a los dos grandes partidos nacionales, PP y PSOE, de haberse comportado como los nacionalistas en la pasada legislatura, en su “intento” de “satisfacer a los nacionalistas”, algo que considera imposible, porque son “insaciables”.