En un encuentro informativo del Foro de la Nueva Energía, organizado por Nueva Economía Fórum, Villaseca opinó que “el ámbito de la Unión Europea sería el adecuado” para regular esta energía, tanto por motivos de seguridad, como de tecnología y eficiencia.

En este sentido, incidió en que la decisión de emprender nuevos reactores nucleares requiere de garantías regulatorias, que den fiabilidad para acometer inversiones. Asimismo, mencionó la necesidad de abordar el riesgo que supone para el medioambiente el tratamiento de los residuos; un riesgo que, en su opinión,“se puede resolver, como se hizo en el pasado”.

A su juicio, el cierre de la central burgalesa de Garoña en 2013 es una “decisión política”. Añadió que “va a ser muy difícil prescindir de ninguna forma de energía” y añadió que “sería una pena que no continuaran” en funcionamiento plantas “técnica y económicamente viables”.

Por otro lado, Villaseca se manifestó convencido de que tanto el Gobierno como la oposición son conscientes de la importancia clave de la energía para la economía, y se mostró esperanzado en que pueda alcanzarse un pacto de Estado en materia de energía.

En cuanto a la situación que atraviesa el carbón nacional, el consejero delegado de Gas Natural afirmó que “los precios de los carbones nacionales no pueden competir”, y achacó a la racionalidad económica la discriminación a la que se ve sometido en el mercado.

Para Villaseca, “el carbón es un buen combustible, con un precio interesante y reservas probadas elevadísimas”, mayores que las de gas y petróleo, cuyo gran problema son las emisiones de CO2.

Por ello, apostó por avanzar en las tecnologías de captura y tratamiento en CO2 para poder sacar partido a esta “buena fuente de suministro”.