Señaló que con el desarrollo de esta normativa el único logro que se alcanza es “avanzar hacia la individualización del trabajador”. Sus declaraciones se enmarcaron dentro de un debate informativo organizado en Sevilla por Nueva Economía Fórum acerca del contenido de esta nueva normativa, en el que participó también el presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía, Santiago Herrero.

Tras su rechazo frontal a la reforma, Carbonero indicó que su aplicación sitúa a los trabajadores y desempleados en “un espacio muy preocupante para toda la sociedad”. En este sentido, refirió que el texto preocupa especialmente a los sindicatos porque “genera incertidumbre, miedo e inestabilidad por una bajada de la masa salarial del país”.

Un argumento al que sumó lo que consideran el inicio de un camino “hacia el empleo precario, eventual, con menos cualificación e identificación con los proyectos empresariales”.

Asimismo, ofreció una visión apocalíptica del nuevo escenario que se presenta tras la reforma del Gobierno y que a juicio de los sindicatos va a significar “menos capacidad de compra en la demanda interna y la prolongación en el tiempo de la recesión y la crisis”.

PACTOS DE LA MONCLOA
Durante su intervención, el secretario general de CCOO en Andalucía apeló al recuerdo de los Pactos de la Moncloa, firmados al inicio de la etapa democrática y en los que, según indicó, “todos los sectores sociales fueron capaces de aceptar un acuerdo de relaciones laborales que permitieron crear empleo”. Aun así, también reconoció que esta misma normativa “permitió a su vez destruir empleo a una velocidad vertiginosa cuando la economía ha ido mal”.

En un balance positivo de aquellas medidas, Carbonero reivindicó el papel de los sindicatos en esa normativa y solicitó se tengan en cuenta sus perspectivas para modificar el texto actual.

Finalmente, recordó al Gobierno central y a su presidente, Mariano Rajoy, que “el abaratamiento de los salarios no va a suponer una mejora de la economía”. En concreto, Carbonero aseguró que la sociedad española debe apostar en los próximos años por “unos factores de competitividad basados en el conocimiento y no en los salarios bajos”, en referencia a las políticas que impulsa la nueva reforma. En este sentido, el dirigente sindical dijo que “en esa materia nos ganan la partida China, África o los países sudamericanos”.