Durante su participación en el acto informativo organizado por Nueva Economía Fórum, manifestó que la sanción de casi 19 millones de euros por manipular las estadísticas de déficit y deuda en dicha comunidad “en principio, debe pagarla” el Ejecutivo pero se mostró seguro de que “sin duda” quienes la pagarán son los ciudadanos españoles.

Con esta cuestión, el líder de los socialistas valencianos aprovechó para incidir varias veces que “Valencia no es Grecia”, acusó al Partido Popular de hacer “políticas a la griega” que “han quebrado” a la gente por la “corrupción sistémica” extendida en la región.

El candidato socialista recordó, tras la comparación, que el Ejecutivo griego maquilló los datos de las cuentas públicas que remitían a la Comisión Europea y, aunque lo comparó con la situación valenciana tras la multa de la UE, insistió en que Valencia es “diferente” porque tiene un tejido empresarial y situación social distinta a la griega.

Denunció que los populares, actualmente al frente de la Generalitat, guardaban “las facturas en el cajón” y que por ello, su primera medida al llegar al Gobierno valenciano será hacer una auditoría pública para saber cómo están las cuentas. Al tiempo que remarcó que esta situación supone un “ataque a la credibilidad” no sólo de Valencia sino de España.

No obstante, el candidato socialista afirmó que la situación económica de Valencia está “absolutamente descontrolada” y que ésta es la región “más endeudada de España”. En este sentido, remarcó uno de sus ejes de Gobierno será “exigir” un cambio en el modelo de financiación y el pago de la “deuda histórica”. “Es la única comunidad pobre que paga como rica”, sentenció Puig.