Así lo aseguró Varela en Madrid en un encuentro informativo organizado por Nueva Economía Fórum para analizar los comicios extremeños, en el que también participó Fernando Vallespín, expresidente del CIS y catedrático de Ciencia Política. Varela afirmó que el PP "nunca dijo aspirar a la mayoría absoluta" y su "objetivo declarado era conseguir una situación en la que con la abstención de Vox tuvieran asegurada la investidura", escenario que se ha producido.

El analista indicó que Guardiola "incluso se puede permitir el lujo de presentarse en el Parlamento extremeño sin negociar absolutamente" y decir "aquí estoy yo, aquí está mi programa, y ahora atrévanse ustedes a votar con la izquierda y provocar una repetición de las elecciones", un desafío que considera difícil de asumir por Vox.

Subrayó que la investidura de la presidenta extremeña está "completamente asegurada" porque, con la abstención de Vox, Guardiola cuenta con los apoyos necesarios para ser investida sin depender de pactos, lo que le otorga una posición de fuerza ante el resto de formaciones políticas.

HEGEMONÍA HISTÓRICA ROTA

El experto electoral enmarcó estos resultados en que Extremadura "ha sido electoralmente el territorio más hegemónico del PSOE durante cuatro décadas", donde el PSOE "ganó diez de 11 elecciones autonómicas", superó "el 50% del voto" en cinco ocasiones y "nunca estuvo por debajo del 40%".

Destacó que "nunca" desde 1983 "el conjunto del voto de la derecha superó al conjunto del voto de la izquierda", pero en estos comicios "los dos partidos de la derecha sumaron el 60%" frente al "36%" de la izquierda, una diferencia de "24 puntos".

Varela interpretó estos resultados como un "movimiento geológico" más que biológico, comparándolo con lo ocurrido en Andalucía, donde "una vez que se producen" estos cambios "a lo mejor duran para 20 años", y expresó su "impresión de que el fenómeno de Extremadura no ha sido un hecho coyuntural".

ACIERTO ESTRATÉGICO

Por su parte, Vallespín valoró si el PP y Guardiola acertaron al adelantar las elecciones, concluyendo que "sí y que no": "No, si lo que estaba buscando era la mayoría absoluta" y "sí, si lo que estaba buscando es obtener más votos que el resto de la izquierda".

El expresidente del CIS añadió que la convocatoria electoral mereció la pena "si lo que se trataba es de simbolizar en un acto electoral solemne lo que podríamos denominar la fatiga del sanchismo", algo que "ha quedado claramente meridiana" tras los resultados de este lunes.

El catedrático señaló como "la peor noticia para el PSOE" que "muchos votantes socialistas, si no la mayoría, se han ido a la abstención", lo que plantea la "pregunta fundamental" de "hasta qué punto Vox da miedo a la izquierda tanto como para movilizarse".