"Si los Principes de Asturias adoptaran un niño habría que tomar una decisión sobre la sucesión"

Francisco Rubio Llorente, en el Fórum Europa

"Si los Principes de Asturias adoptaran un niño habría que tomar una decisión sobre la sucesión"

En relación a las diferentes materias de las que trató sobre la Corona

MADRID, 9 de marzo. El presidente del Consejo de Estado, Francisco Rubio Llorente, avisó hoy de que si se diera el caso de que los Príncipes de Asturias optaran por adoptar un niño, habría que tomar una decisión sobre la sucesión a La Corona de acuerdo con la naturaleza de la institución monárquica y el derecho público que la regula, y no con el derecho a la igualdad de todos los hijos con independencia de su origen, que consagra el Código Civil. Durante su intervención en el Fórum Europa, organizado por Nueva Economía, con la colaboración de Europa Press y el patrocinio de British Telecom e ING Direct se le preguntó, en primer lugar, si bastaría con suprimir la referencia a la supremacía del varón sobre la mujer en el artículo 57.1 de la Constitución, a fin de garantizar la igualdad entre sexos en el acceso a La Corona.Rubio Llorente respondió afirmativamente, aunque añadió que seguramente habrá que tomar "alguna otra cautela" para que la modificación del citado artículo no afecte a los derechos del actual Príncipe de Asturias y, además, tenga en cuenta el momento de entrada en vigor de la reforma, "en relación con la posibilidad de que el Príncipe tenga descendencia en un tiempo relativamente breve. Pero son problemas técnicos muy menores", señaló.

LA HIPÓTESIS DE LA ADOPCIÓN

 

Sin embargo, se le planteó a continuación una hipótesis sobre este mismo asunto que hizo dudar al presidente del Consejo: "¿Qué ocurriría sin Don Felipe y Doña Letizia decidieran adoptar para tener un hijo?", se le preguntó en el coloquio posterior a su conferencia. "La imaginación no tiene límite... es un problema que yo nunca me había planteado", admitió "Creo que la sucesión en La Corona está construida sobre la idea de que el sucesor es el hijo legítimo del Rey difunto --continuó--. Es verdad que la Constitución dice que los hijos son todos iguales con independencia de su origen... Es un problema para el que no tengo una respuesta fácil. Pero tiendo a encontrar la idea inaceptable".En ese mismo coloquio, se le recordó que, según la ley vigente, los derechos de los hijos biológicos y de los adoptados son los mismos. "Sí señor", ratificó Rubio Llorente, aunque introdujo un 'pero' en lo que concierne a la monarquía: "Lo que sucede es que la sucesión en La Corona no es hereditaria".En este contexto, recordó que cuando la sucesión sí es hereditaria, se rige por el derecho privado. Pero la sucesión a La Corona se regula por el derecho público, específicamente por el constitucional, lo que conlleva que no sea "el príncipe el que herede La Corona sino La Corona la que herede al príncipe --adujo--. Quien pasa a ocupar el Trono lo hacer porque en él se dan las condiciones que el derecho público exige, no por tener un derecho civil por la relación que lo une con su padre".

Finalmente, avisó que si la hipótesis de la adopción se convirtiese en realidad, debería ser "estudiado, analizado y tratado" por el Consejo de Estado, "pero el análisis habría de hacerse de acuerdo con la naturaleza de la institución, que no se rige por el derecho civil y a la cual no es aplicable, sin más, el principio de que todos los hijos son iguales con independencia de su origen", concluyó.