Así lo dijo durante la presentación que hizo de Itxaso en un acto organizado por Nueva Economía Fórum en Bilbao, donde Andueza ensalzó que las capacidades de “humildad, trabajo y diálogo” del dirigente socialista han permitido que el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, vuelva a “confiar en él para llevar las riendas de la Delegación del Gobierno en el País Vasco en esta nueva legislatura recién echada a andar”.

Durante la intervención, Andueza también alabó la acción de Itxaso desde la Delegación de Gobierno para “desmontar” algunas “creencias” que llegan “desde ambos lados del nacionalismo”. “Y dejar claro que, por ejemplo, el euskera no es patrimonio de nadie, sino de todos y todas. O que Euskadi es una tierra plural, diversa, que hay en ella personas que piensan y sienten diferente, que proceden de diferentes lugares, y que no por ello son menos vascos o vascas”, describió.

El líder de los socialistas vascos, que se ciñó a comentar la figura política de Itxaso, recordó que “Denis es el ejemplo palmario de lo que es ser socialista en Euskadi” porque su “compromiso” con el partido, con sus ideas, “se hizo fuerte durante los años más oscuros, esos años imposibles de olvidar, con ETA como protagonista indeseada de nuestras vidas”.

“Es en ese momento cuando, con otro grupo de jóvenes entre los que tengo el honor de incluirme, decidió dar un paso al frente y ejercer de altavoz de quienes pensaban, de quienes pensábamos diferente y estábamos dispuestos a defender nuestras ideas frente al terror”, rememoró Andueza.

Así, subrayó que Itxaso es de los que “saboreó con más intensidad el fin del terrorismo que había atenazado nuestra tierra y a sus gentes con su dictadura del miedo durante medio siglo”.

Y como “son años imposibles de olvidar y Denis no lo ha hecho nunca”, Andueza apuntó que en la acción del hoy delegado de Gobierno en sus distintas responsabilidades políticas “siempre” ha estado “presente al lado de las víctimas en su lucha por no ser olvidadas y para que salga a luz el verdadero relato de lo que ocurrió en Euskadi, un ejercicio de memoria imprescindible”.