Al participar como ponente en este evento informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Barcelona, Feijóo cargó contra quienes han convertido la mentira en su seña de identidad y “clave de bóveda de su acción de gobierno”. “Lamentablemente, Cataluña ha estado inmersa en una espiral, en mi opinión, de mentiras intensivas”, afirmó.

Dichas mentiras, sostuvo Feijóo, han dañado a su economía, a su sociedad y a sus instituciones. De tal forma, criticó “la mentira de una Cataluña a la que le iría mejor haciendo un cordón sanitario al PP" y también rebatió que en las semanas previas a las elecciones de l23-J se repitiera el mantra de que Cataluña hoy “está mejor que en 2017”.

Feijóo determinó que la economía, la situación social, la vivienda y los servicios públicos están “hoy peor” en Cataluña que en el año 2017. “¿Qué está mejor?”, preguntó, y consideró que la única conclusión posible “es que hay algunos partidos políticos a los que les va mejor que en el año 2017”, pero “a Cataluña, no”.

El presidente del PP también recordó cómo tras los comicios generales “la maquinaria gubernamental se afanó en empezar a contar las bondades de una pretendida mayoría progresista”. Ahora, “es verdad que hay reuniones, se filtran peticiones, se establecen supuestas líneas rojas” que luego se “borran” y “se firman con pompa” acuerdos de coalición.

A su juicio, todo ello forma parte de “una cierta mascarada para tapar la verdad” y es que “la única realidad es que la investidura no depende de nada de lo que se está hablando y pactando estos días” porque el “único protagonista de esta película” es el independentismo catalán y Sánchez “un mero actor de reparto esperando a que el director le diga si entra o no entra en escena”.

En este contexto en el que consideró que la "aritmética" arrincona a la “ética”, Feijóo defendió que “lo que necesita Cataluña es una revolución de la verdad”. En su caso, prometió no cansarse nunca de decir la verdad a los catalanes “a pesar de que a veces no suene bien”. “Le diré la verdad a los votantes del PSOE de Cataluña”, aseguró, y agradeció en este punto especialmente la presencia en este evento del expresidente de la Generalitat José Montilla.

“Le diré la verdad a los votantes del PSC que otorgaron la victoria a un partido que hoy negocia lo contrario de lo que juro y perjuró en campaña”, aseguró Feijóo, para a continuación prometer también decir “la verdad a los votantes de Junts”. “Estoy convencido de que no entienden que su voto valga para aplicar la política económica de Podemos”, arguyó.

También subrayó que dirá la verdad al conjunto de catalanes para que “no dejen que el cuarto y el quinto partido en votos en las elecciones generales hablen por todos ellos”. “La verdad hoy, aunque resulte incómoda, es que si una mayoría de catalanes hubiese tenido como prioridad la amnistía, los dos únicos partidos que la llevaban en su programa no hubiesen quedado de cuarto y quinto en Cataluña”, sentenció.

“En una democracia normal, los condenados no redactan el Código Penal ni los abogados de los acusados redactan las amnistías. Y la verdad más palmaria es que Cataluña necesita que todos hablemos más de cómo gestionar bien el dinero de los catalanes que de los problemas que tienen algunos políticos con la Justicia”, expuso.

Por todo ello, Feijóo insistió en que Cataluña “necesita la revolución de la verdad y la revolución de la política de verdad, la que se ocupa de los problemas de los ciudadanos y no de los problemas de los políticos, la que se ocupa de la igualdad y de la cohesión y no de privilegios, en la que se toman decisiones que fortalecen las instituciones y la imagen del país y no las que la socavan”.

De tal manera, consideró que se puede “volver a ilusionar a una sociedad con un desencanto evidente y entendible”. “Mi gran objetivo si soy presidente del Gobierno será que Cataluña vuelva a competir como el motor económico de España y quiero que el partido en el que milito sea el que proponga soluciones a los problemas reales de la mayoría de los catalanes”, enfatizó.

Feijóo defendió que Cataluña “es una nacionalidad histórica” porque “es el pacto que nos dimos”. “En Cataluña, la Constitución fue de los territorios donde obtuvo más síes”, rememoró, por lo que defendió que “una denominación que concite tanto consenso” como la de “nacionalidad histórica”.

Finalmente, ahondó en que no conoce región europea que tenga “más competencias que Cataluña” salvo el País Vasco. “Yo no sé por qué consideramos de menos todas las competencias que tenemos. ¿Las gestionamos con eficacia? ¿Las gestionamos con rigor?”, finalizó el presidente del PP.