Durante su intervención en el citado foro de debate, organizado en Madrid por Nueva Economía Fórum, Boyer afirmó que no hay que ser “timoratos”, ya que la reducción del déficit y la estabilización de la deuda púbica con planes de ajuste “muy duros” podría poner en riesgo el crecimiento económico.

No obstante, aseguró que dadas las actuales dificultades financieras “hay que estar atentos para no generar una espiral deflacionista con futuras caídas del PIB y del empleo”.

A su juicio, resulta “inverosímil” que España vaya a caer en una “planicie” con un estancamiento en los niveles de PIB y en la generación de empleo.

Por este motivo, Boyer manifestó que es necesario mantener una política económica no tan rigurosa como la de Alemania que, según dijo, “ha renunciado explícitamente a ejercer el papel de locomotora de Europa”.
El ex ministro socialista indicó que no está de acuerdo con los “análisis simplistas” que aseguran que España no es competitiva.

Según explicó, el exceso de inversión es más fácil de corregir que “no tener suficientes recursos para poder desarrollar un sistema productivo, como ha ocurrido en Grecia”.

En este sentido, afirmó que la sobreinversión en el sector inmobiliario no fue el único motivo del estallido de la crisis económica en España, ya que, a su juicio, el sector de la construcción, por ser intensivo en mano de obra, no tenía tanta importancia en el peso de la economía, sino en la creación de empleo, lo que ha llevado a que la actual tasa de paro de este sector sea del 26%.

Asimismo, Boyer indicó que aunque España sostiene una bolsa de paro grande, “no hay ninguna razón para que esto no se recupere”.

Según dijo, desde 1950 el PIB español se ha multiplicado por ocho en términos reales y “el éxito de la economía española ha sido asombroso, superando otras crisis como la del petróleo”.