Durante su intervención en el citado encuentro informativo organizado en Bilbao por Nueva Economía Fórum, Urkullu adelantó los ejes principales de su programa basado principalmente el crecimiento económico donde además propuso crear un fondo de financiación y ahorro de 250 millones para incentivar la creación de nuevas empresas y apoyar a los emprendedores con el fin de conseguir su “consolidación y arraigo en Euskadi”.

El candidato jeltzale manifestó que “la mejor política social es el empleo”. En este sentido, señaló que todo indica que “estamos creciendo en la buena dirección” y que el objetivo central debe seguir siendo el empleo.

Además adelantó que su partido ha asumido el reto de alcanzar el 25% del PIB industrial en 2010, en una clara apuesta por el sector de la industria que “vuelve a ser el motor de la economía vasca”.

Urkullu desgranó durante su conferencia los diez pilares de la Estrategia 2020 por el empleo de su formación política, entre los que están: incentivar las empresas más competitivas y grupos empresariales potentes, la apuesta por la internacionalización y diseñar estrategias de innovación tecnológica.

Un segundo pilar sería, según el candidato vasco, apostar por la investigación básica y universitaria de excelencia, así como la “especialización inteligente”.
 
Otra de las medidas anunciadas por Urkullu sería la implantación de planes específicos para el empleo y la inserción laboral haciendo especial hincapié en los jóvenes desempleados. Para ello adelantó un Plan de Empleo dotado con 1.000 millones de euros, que incluya una línea específica de apoyo al empleo juvenil para ofrecer una primera experiencia laboral “práctica a 20.000 jóvenes”.

El programa del PNV también apuesta por la consolidación del empleo público y el rejuvenecimiento en el sector público” a pesar de las “trabas” impuestas desde el Gobierno central para la convocatoria de empleo público.

Otro de los pilares mencionados por Urkullu es el de garantizar “la estabilidad y responsabilidad presupuestaria” como elementos fundamentales para la recuperación económica, así como reactivar el diálogo social y la negociación colectiva. “Euskadi no es un país con un problema de conflictividad laboral” dijo.

Por último Urkullu apostó por un Servicio Vasco de Empleo de calidad y un mayor acercamiento de Lanbide a la empresa.