Así lo subrayó durante el encuentro informativo organizado por Nueva Economía Fórum, en el que ofreció su “visión sobre el convulso y volátil entorno estratégico actual”, en el que “estamos siendo testigos de un punto de inflexión en la conformación de nuestra seguridad y defensa” como consecuencia de la invasión de Ucrania por parte de la Federación Rusa.

El Jemad aseguró que, a lo largo de los últimos años, “hemos sido testigos de una creciente asertividad por parte de la Federación Rusa”, una asertividad con Occidente que, hasta ahora, “se había materializado a través de amenazas híbridas”, con el “aparente objetivo de propiciar nuestra desestabilización” muchas veces “a través de acciones maliciosas de manipulación” que, por ejemplo, “se han visualizado en intentos de injerencia en procesos electorales, tanto en Europa como en los Estados Unidos”.

“Hace poco más de un mes Rusia cruzó todos los límites, todas las líneas rojas con la falsa excusa de su seguridad”, señaló López Calderón, para quien el Kremlin “fue más allá y quebrantó de forma clara y notoria los principios del derecho internacional”, con su “ilegítimo ataque e invasión a Ucrania”. Un ataque, aseveró, que “había sido anticipado por la Alianza Atlántica, pero constantemente negado por el Kremlin, acusando a Occidente de caer en una verdadera paranoia”.

La situación generada por la invasión, “confirma el propósito del presidente Putin de restablecer el poder de los tiempos soviéticos”, afirmó el Jemad, “tanto en influencia global, como con la regeneración de su anillo de seguridad regional”, sin que le importe “violar el derecho internacional humanitario y el derecho de la guerra, como tristemente estamos contemplando”, señaló en referencia a la reciente masacre de civiles en la localidad de Bucha.

Para López Calderón, “el total revisionismo del Kremlin busca sustituir el actual orden mundial basado en reglas” y reemplazarlo por otro “cuya palanca principal es la fuerza”, un concepto “respaldado en muchos aspectos por China, que, si bien utiliza principalmente su potencial económico, cada vez afianza más su progresión en el ámbito militar”.

MÁS ALLÁ DE LA ZONA GRIS

Rusia, señaló el almirante, “ha consolidado su estilo de coacción multidominio como forma de ejercer las relaciones internacionales, en el caso de Ucrania más allá de la zona gris”, y por otra parte “ha demostrado también capacidad y libertad de acción en el ámbito cognitivo, aunque en esta ocasión hay que reconocer que no les ha salido bien”, pues, en su opinión, “el presidente Putin claramente ha perdido la batalla del relato internacional y a su vez ha tenido que demoler aún más la libertad de información y opinión dentro de sus fronteras”.

Complementariamente, recalcó, “Rusia ha normalizado el empleo de acciones ofensivas en el ámbito cibernético contra servicios públicos o privados de los Estados que se oponen a sus intereses”, un factor que no debe hacer “olvidar el recurso a la amenazante retórica nuclear que el ministro Lavrov o el propio presidente Putin”, aunque, aseguró el Jemad, dicha retórica “puede interpretarse como una muestra de cierta debilidad”.

Rusia “ha intentado retomar su imperialismo” y para ello “ha querido reinstaurar sus Estados satélite, como han demostrado las intervenciones en Bielorrusia y Kazajistán durante su revueltas internas”.

Y, por otra parte, subrayó López Calderón, la invasión de Ucrania ha sido “el método a emplear por Putin donde no cuenta con capacidad para imponer por otros medios gobiernos títere”, en una acción en la que “es evidente que se ha equivocado en sus cálculos”, porque “ya ha perdido esta guerra, al menos en el nivel político estratégico”.