Durante su participación en el acto organizado por Nueva Economía Fórum, Piñera mostró con rotundidad su oposición a que el castrismo se pueda extender a otros países de América del Sur.

El presidente de Chile se mostró convencido de que la democracia llegará a Cuba, aunque matizó que el tiempo que tarden en producirse los cambios dependerá de la “capacidad de longevidad de los líderes”, refiriéndose a los dos hermanos Castro.

Asimismo, dijo que en Cuba no se respetan los derechos humanos y añadió que si bien es una isla geográfica será muy difícil que se quede como una isla ideológica, por lo que confió en el reencuentro, dijo, de Cuba con la democracia y los derechos humanos.

En este sentido, afirmó que tiene “mucha fe para que más temprano que tarde se recuperen la democracia y los derechos humanos” en la isla.

Por otra parte, el presidente de Chile dijo que en Honduras, antes de Porfirio Lobo, había una democracia, aunque se le pudieran hacer “reproches”, explicó. Después, agregó, se produjo un golpe de estado que, finalmente, se subsanó con unas “elecciones legítimas”.

A este respecto, Piñera indicó que siguen desde Chile “muy de cerca” la situación en Honduras y, en concreto, los avances del Ejecutivo liderado por Porfirio Lobo. Asimismo, apuntó que los actuales dirigentes del país centroamericano trabajan para normalizar la situación.

Por otra parte, el presidente chileno apuntó de forma “categórica” que Chile “no está en ninguna carrera armamentística” en la región. “Lo que Chile ha hecho es renovar material (militar), como otros países”, concluyó.