“Yo no deseo ser presidenta”: así de contundente se mostró Bonig, cuyo nombre había sonado estas últimas semanas como uno de los mejores posicionados para darle el relevo a Alberto Fabra, que todavía no está confirmado como candidato del Partido Popular a la presidencia de la Generalitat para las próximas elecciones autonómicas de 2015.

Preguntada directamente también sobre la opción de plantear primarias abiertas en su partido, Bonig no fue en esta ocasión tan clara. “Desde un punto de vista teórico, claro que soy partidaria de la participación” o “que se abran debates de participación me parece adecuado”, despejó al respecto, para después defender que “el PP se ha renovado” mientras que en el PSPV, “20 años después, gobiernan los mismos que los que estaban gobernando cuando estábamos tomando la comunión”, aseguró la consejera, nacida en 1970, y poniéndose a ella misma como ejemplo de renovación. “No seré yo quien critique a otros partidos”, dijo con anterioridad.

Bonig, que admitió ser “guerrera” y que le gustan los “mítines” y la política “con mayúsculas, basada en ideología” fue presentada en el foro organizado en Valencia por Nueva Economía Fórum por Rafael Catalá, secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda. Al encuentro informativo también acudieron como público el presidente de Las Cortes valencianas, Juan Cotino; la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Paula Sánchez de León; la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, así como otros miembros del Gobierno valenciano.