Agregó que con esta norma "queremos impulsar la competitividad de la economía guipuzcoana en un contexto de crisis económica; queremos terminar con la incertidumbre y dar seguridad jurídica a las empresas de nuestro territorio".

Sin embargo, alertó de que la falta de acuerdo en esta materia "nos situaría en un tipo del 32%, 4,6 puntos por encima de Álava y Vizcaya", algo "inaceptable" para Guipúzcoa y Euskadi.

En este sentido, quiso dejar claro que la iniciativa de Guipúzcoa sobre el incremento del tipo marginal del IRPF y el mantenimiento del Impuesto de Patrimonio es sólo una propuesta que deberá debatir el Órgano de Coordinación Tributaria (OCT).

El diputado general insistió en que "nosotros no hemos decidido nada", sino que "Guipúzcoa se ha limitado a aprobar una propuesta que se trasladará al OCT y en ese seno se debatirá".

Por ello, no quiso adelantarse a ningún debate, ya que "podría condicionarlo". "Este tipo de cuestiones hay que formularlas con mucha responsabilidad. Mantener el debate en los medios de comunicación es negativo y no quiero adelantarme", explicó.

También defendió la armonización fiscal en el seno de la Comunidad Autónoma Vasca y dijo que, "en un contexto en el que estábamos a punto de caramelo para constituir una desarmonización fiscal de pantalón largo", él mismo estableció un decreto norma "forzando mucho la máquina en Guipúzcoa para que el tipo general, que era una cuestión que desarmonizaba de forma muy grave los territorios, se pudiera evitar".