En su intervención en este acto, organizado por Nueva Economía Fórum, Thumann aseguró que "el lío que se ha montado" en Europa se debe a la despreocupación de la mayoría de los países por el estado de sus cuentas públicas.

En este sentido, criticó que los países europeos han estado viviendo por encima de sus posibilidades. “Todo el mundo entiende que no puede gastar más de lo que ingresa, pero los gobiernos piensan que sí pueden”, denunció.

Así, urgió a los estados a que consoliden su gasto público cuanto antes, ya que, “si no, los mercados siemprea van a ir en contra”. “La clave es la consolidación financiera”, reiteró.

Por esta razón, consideró que “es el momento” de que la UE ejerza “más presión” sobre los países para que cumplan con el programa de estabilidad.

Thumann subrayó la importancia de que los países apliquen las medidas de recorte del gasto fiscal “de forma coherente”.

También pidió a las organizaciones sindicales que “entiendan” que las medidas de reducción del déficit adoptadas por el Gobierno “son indispensables para que España recupere un crecimiento de la economía y del empleo sostenible”.

En cuanto a las medidas de intervención estatal para sopstener la economía en el comienzo de la crisis, Thumann afirmó que “fueron correctas” pero advirtió de que “ya han llegado a su límite”.

En su opinión, han provocado una “desestabilidad financiera” que es “un problema”, por lo que serán necesarios “grandes ajustes”.

MÁS CRISIS EN ESPAÑA
El presidente de Businesseurope se refirió también a las previsiones de la patronal para 2010 y 2011 para Europa, que se sitúa en un crecimiento del PIB del 1,4% y del 1,6%, respectivamente.

Para España, la organización empresarial estima que las consecuencias de la crisis serán “más duraderas”, por lo que el PIB caerá un 0,8% en el presente ejercicio y crecera un 0,3% en el próximo año.

En cuanto al empleo, Thumann subrayó que las previsiones para Europa “son mejores hoy que hace unos meses”, pero lamentó que, en España, el paro se estabilizará en el entorno del 19%.

Asimismo, subrayó la importancia de que el Ejecutivo adopte “políticas sólidas” que mejoren la competitividad y de que empresarios y sindicatos mantengan “una verdadera moderación salarial”, algo para lo que el acuerdo sobre negociación colectiva firmado en febrero “va en la buena dirección”.

A estos factores se suman la inversión y las reformas laborales y de la Seguridad Social como claves para la recuperación económica.

Sobre la situación del euro, instó a los países de la eurozona a hacer “todo lo que podamos para estabilizar” la moneda comunitaria.

En este sentido, reclamó a Alemania y Francia que lleguen a un acuerdo “inmediatamente” para defender al euro y que “inviten” al resto de países de la zona a sumarse al pacto.

No obstante, criticó a los que hablan de la “debilidad” de la moneda, y recordó que todavía se encuenrta por encima del nivel de cambio con el dólar con el que empezó a circular. Así, afirmó que mientras se mantenga en un nivel entre 1,10 y 1,30 dólares, “seguirá siendo un euro fuerte”.

Sin embargo, admitió que la industria europea “se está beneficiando” de su devaluación respecto al dólar.

EMISIONES
Sobre los compromisos de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, el responsable de los empresarios europeos advirtió que rechazarán ir más allá de los niveles acordados en la actualidad hasta que el resto de países “también se lo tomen en serio”.

En este sentido, aseveró que aumentar el compromiso de reducción del 20% actual a un 30%, mientras que otros países como Estados Unidos o China no lo hacen, podría suponer la pérdida de unos tres millones de puestos de trabajo en Europa.

Por esta razón, dejó claro que, mientras que no sea un acuerdo global con el resto de países, “no aceptaremos mayores compromisos” de reducción de emisiones.