Así lo afirmó durante su intervención en este desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Valencia, donde destacó que, en dos años de legislatura, ha hecho "posible lo que parecía imposible”, porque “parecía imposible conseguir una licencia en un plazo razonable”.

Catalá recordó que cuando llegaron al poder “se tardaba más de cuatro años, unos 1.500 días, una cifra que desmoraliza cualquier inversión”, mientras que hoy “hemos reducido el tiempo en un 70% y estamos en muchos casos en torno a 200 días”, aunque reconoció que “no es suficiente”.

Por eso, la alcaldesa anunció que este mes de julio aprobarán una nueva Ordenanza Reguladora de Licencias “para ganar agilidad y simplificar procedimientos que nos permita bajar aún más los tiempos”.

En este sentido, puso el ejemplo de las obras del nuevo estadio de Mestalla, que llevaban 15 años para dar las licencias de obra. Ahora, “las obras están en marcha, tenemos la licencia y fichas muy endurecidas que protegen los intereses de esta ciudad”, aseveró.

La regidora constató que “parecía imposible que la iniciativa privada tuviera su espacio en Valencia”, pero valoró que, “simplemente, poniendo en orden el colapso de licencias, hemos desbloqueado inversiones que suman 950 millones de euros y que generarán 16.000 empleos directos e indirectos en esta ciudad”.

Se trata de “proyectos que llevaban años esperando una respuesta administrativa que nunca llegaba”, comentó la alcaldesa de Valencia, quien confió en seguir reduciendo los tiempos para la concesión de licencias que permita seguir creciendo a la ciudad.