“Sí, la he invitado. No sé si podrá venir, está en una situación peculiar que no voy a describir porque todo el mundo la conoce”, confesó en su intervención en el evento informativo que organiza Nueva Economía Fórum. Podemos también ha incluido la Comunidad Valenciana entre los lugares entre los que, según una lista que la secretaria de Organización del partido, Lilith Verstrynge, envió hace más de un mes al jefe de gabinete de Díaz, Josep Vendrell, querría que la vicepresidenta hiciera campaña por su candidatura conjunta con IU, que compite con las de Compromís, la formación de Ribó, que se presenta en solitario.

Sobre esta rivalidad, Ribó contestó a una pregunta que se le formuló en el evento que Compromís planteó “en su momento” llegar a un acuerdo con IU, pero que “no fue posible”. “Entendemos las dinámicas particulares de las diferentes formaciones políticas”, deslizó, aludiendo al compromiso de IU con Podemos, que se presentan juntos en 10 de las 12 comunidades que celebran elecciones autonómicas”. Nos habría ´gustado llegar a acuerdos pero a veces es posible y a veces no”.

En cualquier caso, el alcalde aseveró que “la campaña de Valencia es de Valencia” y que “no querría que en ningún momento esto fuera un campo de batalla de otras campañas a nivel estatal”, y en otro momento aseguró que “el primer objetivo de Compromís es que ganen las fuerzas de izquierda”, y por tanto dijo que “pues claro” que aceptaría ser vicealcalde si el Partido Socialista o Unidas Podemos fueran más votados que su formación y las tres sumaran mayoría en el Pleno municipal.

También, y sin que nadie se lo preguntara, citó a Díaz al afirmar que “es el momento de Sumar y estamos trabajando en esta dirección”, porque, como ella dice, “política con mayúsculas es dialogar y dialogar, especialmente con quienes no piensan como nosotros”, y también “acordar”. “Con Yolanda Díaz me entiendo bien”, aseguró, y, como ella, sólo situó como adversaria a la “extrema derecha”, que “está a las puertas de un Gobierno del PP, en la línea de Trump, de Bolsonaro y de la extrema derecha europea”.