Así lo señaló en un encuentro telemático organizado por Nueva Economía Fórum en el que también intervinieron el vicepresidente de la CEE, el cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, y el presidente de Cáritas, Manuel Bretón.
 
Sobre la eutanasia, Omella, también arzobispo de Barcelona, dijo que “es un tema que tenemos que estudiar seriamente” pues “se habían precipitado los políticos en llevarlo al Parlamento sin consenso y sin reflexión”. “No somos dueños de la vida. Me alegro de que se haya aparcado”, indicó.
 
El cardenal consideró que ese debate “está muy unido” a todas las muertes por Covid-19 que se han producido en las residencias y hospitales e invitó a reflexionar sobre “cómo tratamos a los mayores” y si “los aparcamos”.  Por ello, insistió en revindicar los cuidados paliativos: “La moral me dice que no se puede prescindir de una vida y la ciencia que se puede evitar el dolor. Es un tema que hay que reflexionar muy seriamente”.
 
PACTO EDUCATIVO
 
El presidente de los obispos españoles también se refirió a otros temas polémicos y que han sido aparcados por el Gobierno debido a la pandemia, como también son la asignatura de la religión en las escuelas, el futuro de los colegios religiosos concertados, la inmatriculación de bienes por parte de la Iglesia y la fiscalidad.
 
Así, el cardenal Omella remitió a que la libertad de enseñanza está en la Constitución y que corresponde a los padres la enseñanza, los valores y la elección de centros. “Subsidiariamente estará el Estado”, recalcó, insistiendo también en que “la Iglesia demanda una enseñanza gratuita para todos”.
 
La solución que plantea la CEE es “trabajar mucho para el pacto escolar” en el que la red concertada “tiene mucho que decir porque ha hecho un gran trabajo y ha ahorrado mucho dinero al Estado”. Ese pacto, según el cardenal, debería estar basado “en un verdadero diálogo de servicio a la sociedad y no ideológico”. “Lo podríamos llevar a cabo como han hecho en estados europeos vecinos nuestros”, indicó.