“Cerrar los portales de información pura es complicado, porque hay demasiada información en la web. Sí se pueden cerrar servicios muy concretos o revistas digitales, que van a un ‘target’ muy limitado, como ha hecho ‘El Economista’”, dijo De Salas, durante una conferencia organizada en el citado encuentro informativo, organizado por Nueva Economía Fórum.

A su juicio, los que tienen que lanzarse a la “prueba y error” del ‘premium’ en Internet son los medios grandes, para “ver qué sucede” en medio de este escenario actual de crisis económica y desplome publicitario.

El editor cree que Internet es el pilar vertebrador de la prensa en el futuro, pero sin que vaya a desaparecer la versión en tinta. “Un modelo de futuro podría ser una web superpotente y un periódico en papel que se edite solo una vez a la semana. Una especie de gran semanario que ofrezca análisis, opinión y artículos largos”, afirmó.

ESTRUCTURAS INFLADAS
En su opinión, los medios impresos adolecen en la actualidad de estructuras “muy infladas” (“han hecho reducciones de plantilla insuficientes”), tienen un exceso de páginas y deberían prescindir de las ediciones regionales.

De ‘El Economista’, se enorgulleció de que sea “el quinto diario en Internet, solo por detrás de los cuatro grandes”, y que la mitad de su facturación ya provenga de la Red.

Su deuda actual es de 9 millones de euros con los bancos y esperan acometer un tercer expediente de reducción temporal de empleo porque las previsiones del sector para 2014, subrayó De Salas, no son muy optimistas.

Preguntado si piensa dar el salto a la prensa generalista, el editor afirmó que “en papel no lo haría nunca porque ese tiempo ya pasó, pero en Internet quizá sí”.

Carrubba, que ha sido consejero de Ecoprensa, grupo propietario de ‘El Economista’, presentó la conferencia que pronunció el presidente editor de esta cabecera, Alfonso de Salas, en el citado acto informativo, organizado en Madrid por Nueva Economía Fórum.

Carrubba dijo que ‘Il Sole 24 Ore’ se unió al lanzamiento de ‘El Economista’ por su propuesta de “periodismo innovador y riguroso, y su integración de papel y digital, que fue un modelo para ‘Il Sole’”.

“Su plan para Internet fue muy valiente. Muchos no apostaban un duro por Internet porque se suponía que el papel iba a seguir dominando y que la Red únicamente sería un complemento. Pero la realidad ha dado la vuelta a la tortilla”, indicó.

El periodista y académico italiano dijo que la prensa de su país atraviesa los mismos nubarrones que la española, con caídas significativas de ventas, bajada de los ingresos publicitarios y cambio de hábitos de los lectores. “Es una crisis que no es coyuntural ni pasajera”, comentó. “Esto va a suponer un antes y un después en la forma de dar la información”.

Durante una conferencia en el citado foro de debate, organizado en Madrid por Nueva Economía Fórum, De Salas pidió al Ejecutivo que interceda “para conseguir un acuerdo que compense, en parte, el perjuicio que nos causa a los elaboradores de contenidos de calidad que el todopoderoso Google los tome y los publique a voluntad”.

El editor recordó que en Alemania y Francia “ya se ha avanzado en ese sentido” con decisiones de protección a la prensa adoptadas por los gobiernos de Berlín y París.

El presidente de ‘El Economista’ también pidió al Gobierno de Mariano Rajoy que la Ley de Transparencia arroje luz sobre el reparto de la publicidad institucional por parte de las administraciones y empresas públicas.

“Hay gobiernos autonómicos que se dedican a apoyar a sus medios afines que les adulan. Sería conveniente que se supiera todo y que la Comisión Nacional de la Competencia pudiera intervenir”, añadió. “Por ejemplo, en Barcelona son terribles las ayudas que reciben los periódicos de allí, no tiene ni pies ni cabeza.
Luego (la Generalitat) se queja de que no puede pagar las pensiones. Si tienes que pagar los resultados de los periódicos que te son simpáticos...”.

En su catálogo de demandas al Gobierno, Alfonso de Salas también planteó la reducción del IVA aplicado a las publicaciones digitales, de forma que baje del 21% actual y se acerque al 4% del soporte papel.