Jaume Duch afirma que la UE “tiene que tomarse más en serio su política de seguridad y de defensa”
Jaume Duch afirma que la UE “tiene que tomarse más en serio su política de seguridad y de defensa”
Así lo consideró Jaume Duch en el encuentro informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Valencia, durante el que comentó las recientes declaraciones del Alto Representante, Josep Borrell, quien señaló que imaginar que Europa se vea inmersa en una guerra convencional ya no es una fantasía.
Duch aseveró que “no es que suenen tambores de guerra, es que hay una guerra en el continente europeo” por la agresión de la Federación Rusa a Ucrania, y además un conflicto de anexión territorial “algo que no habíamos visto en más de 70 años”.
Por ello, apuntó que la Unión Europea “tiene que tomarse mucho más en serio su propia política de seguridad y de defensa”, una materia que durante años la UE ha delegado de alguna manera en la OTAN y a través de la OTAN en Estados Unidos, “y en la presencia de Estados Unidos en el continente”.
Ahora, subrayó, “estamos en una situación en la que no sabemos cómo eso va a evolucionar en los próximos años”, por ejemplo, en el caso de un regreso de Donald Trump a la Casa Blanca. Estas circunstancias obligan, según Duch, a desarrollar al máximo esa política de seguridad y defensa “que ya forma parte de las competencias, al menos teóricas, de la Unión Europea puesto que es una de las políticas del Tratado de la Unión Europea”.
Una materia a la que “se le dio una consideración secundaria, porque no se veía el interés directo y porque además es una política que difícilmente hace ganar elecciones, es una política que exige, por ejemplo, una distribución diferente del presupuesto de los Estados miembros”.
Asimismo, es una materia que “exige un discurso menos agradable también para los políticos, para los dirigentes sean del país que sean”.
Y pese a ello, señaló cómo se discute actualmente en Alemania sobre la vuelta a un servicio militar obligatorio, o el último presupuesto en Polonia, en el que se dedica a defensa prácticamente el 4% del total.
“No es que suenen tambores de guerra, es que ya estamos en esa situación en la que la mejor manera de prevenir una guerra o de prevenir la extensión de un conflicto es prepararse para que eso no sea posible”, apostilló.