Nadal aboga por acuerdos parlamentarios puntuales entre PNV y PSE y un estatuto de todos los partidos

Sondeó en el Fórum Europa el posible futuro en el País Vasco

Nadal aboga por acuerdos parlamentarios puntuales entre PNV y PSE y un estatuto de todos los partidos

No obstante, abogó por la prudencia a la hora de emitir juicios al respecto

MADRID, 20 de abril. El portavoz y conseller de Infraestructuras de la Generalitat catalana, Joaquim Nadal, abogó hoy en el Fórum Europa, tribuna organizada por Nueva Economía Fórum con la colaboración de Europa Press y el patrocinio de BT e ING Direct, por acuerdos parlamentarios "puntuales" entre PNV y PSE y por un modelo estatutario pactado entre todos los partidos que no parta del Plan Ibarretxe. Nadal no quiso aventurar respuestas "concluyentes" sobre un pacto entre PSE y PNV y advirtió de que la composición parlamentaria "endiablada" que ha resultado de las elecciones vascas, les obliga a todos a "jugar con inteligencia".

Aseguró no saber si lo más inteligente sería un retorno a la coalición entre socialistas y nacionalistas. "A lo mejor --adujo-- lo más inteligente serían acuerdos puntuales con carácter parlamentario y llegar a soluciones que permitan avanzar hacia un modelo estatutario que no parta del Plan Ibarretxe sino de una propuesta conjunta de distintas fuerzas políticas. Son ellos los que deben decidir".

Sí subrayó que el "modelo de confrontación ha tocado techo y parece que se abre la vía del diálogo". "Corresponde a los partidos vascos -agregó--, y fundamentalmente al gobierno español, abordar con tranquilidad y quizás desde cero, esta cuestión de diálogo abierto y franco, sin exclusión de ningún tipo, para resolver el viejo contencioso vasco".

En todo caso, consideró que lo que ha ocurrido en el País Vasco "no tiene por qué dar mayor o menor relevancia a un proceso distinto (el catalán) y planteado desde una óptica distinta desde el inicio".

Nadal no quiso ser más explícito en este asunto, aunque el presidente de la Generalitat, Pascual Maragall, haya ido más allá. "Mi jefe es mi jefe --concluyó-- y yo soy yo y, aunque es verdad que la trascendencia de lo que él diga es muy distinta a la que pueda tener lo que yo diga, creo que tiene más libertad para decirlo que yo, por el cargo que ostenta y lo que representa y porque él mismo sabe la trasncendencia de las cosas que dice. Mi trascendencia es menor, pero debo comportarme como portavoz de un gobierno de coalición y debo ser muy prudente".