Durante el citado encuentro informativo, organizado en Madrid por Nueva Economía Fórum, Trias dijo que es necesario dar un “impulso clave” a activos como son las grandes ciudades, “innovadoras, productivas, competitivas y de futuro”, y como se hizo en los “muy convulsos momentos” que vivió España en los años 80, cuando la tasa de paro alcanzó el 24,5%.

Explicó que para convertirse en “punta de lanza” de la recuperación económica de Cataluña, Barcelona está llevando a cabo una serie de medidas como “la disciplina y el rigor en la gestión de los recursos públicos”.

Así, adaptó su contabilidad al Sistema Europeo de Cuentas, que establece que hay que trabajar con el presupuesto que uno tiene asegurado, no con el que a uno le gustaría tener. Además, ha puesto un “mayor énfasis en las políticas sociales, cuyos presupuestos han aumentado en un 8%.

“Al mismo tiempo, eliminamos burocracia y flexibilizamos procesos para que el ayuntamiento pudiera pagar a 30 días a sus proveedores y no a 100 como sucedía hasta ahora. Es la única posibilidad que tenemos de ser creíbles”, dijo.

BARCELONA: DOBLE A
A su juicio, con medidas como esas Barcelona “ha lanzado un mensaje poderoso de solvencia y rigor a nivel internacional que las propias agencias de calificación de deuda han valorado positivamente”.

En este sentido, añadió que, según Standard&Poor’s, la calificación de la Ciudad Condal, “desligada de la calificación soberana española”, sería de una doble A.

Tras destacar la “espectacular” marca de ciudad que tiene Barcelona, así como su “increíble” capital humano, su creatividad y su capital de innovación, Trias aseguró que la Ciudad Condal “tiene la capacidad de convertirse en la capital económica y logística del sur de Europa y del Mediterráneo”. “Podemos conseguirlo, no les quepa la menor duda”, dijo.

Xavier Trias abogó en su intervención por un nuevo sistema de financiación de los ayuntamientos, algo que necesitan todos, pero especialmente Madrid y Barcelona, porque está claro que el actual “no va bien” y es necesario buscar una “fórmula de futuro”.