Este modelo habría apostado en las últimas tres décadas, pero especialmente en los últimos quince años, por la desregulación de los movimientos de capitales, flexibilidad en la contratación laboral en detrimento de la estabilidad del empleo, deslocalización productiva, liberalización de sectores esenciales, reducción del gasto público y una reforma fiscal que ha beneficiado a las grandes fortunas.

Durante su intervención en el “Fórum Europa. Tribuna Galicia”, organizado por Nueva Economía Fórum, el líder del BNG indicó que el papel de los estados se limitó a funciones de defensa y redujo paulatinamente el gasto social, lo que ha llevado a una depresión que están pagando “las personas cuyas rentas dependen del trabajo y que sufren ahora en el desempleo la fe desmedida en el mercado, especialmente en los países con menos nivel de desarrollo”.

En referencia a la situación española, señaló como culpable a los gobiernos del Partido Popular, “y en parte también socialistas”, que llevaron a cabo procesos de privatizaciones de servicios públicos esenciales, “empezando por las telecomunicaciones o la energía”, contribuyendo así a crear una sociedad injusta, “con un crecimiento económico basado en los beneficios de una economía especulativa, agrandando la desigualdad y agudizando una polarización entre los trabajadores, autónomos y pequeños empresarios y aquellos que acumularon mayor riqueza”.

REDISTRIBUCIÓN DE RECURSOS
Por todo ello, Guillerme Vázquez apostó por una alternativa política que sea consciente de que la crisis se basa en causas estructurales, y que necesita una salida política que empiece por garantizar una redistribución de los recursos para corregir desigualdades.

“El nacionalismo gallego sí está por la labor de que se produzcan ya decisiones en el ámbito político que protejan los intereses de la mayoría de la sociedad y vigilen las estrategias del sector financiero”, manifestó.

 En este aspecto, se mostró partidario de la creación de un sector financiero y productivo gallego y de que el Gobierno de Galicia trace un plan de inversión y ahorro “que apoye la economía productiva” y a los agentes de los sectores estratégicos del país.

Vázquez incidió en la importancia del papel de la cajas de ahorro gallegas en este proceso y recordó que el BNG ha presentado en el Parlamento de Galicia un proyecto de ley que “limite el poder del Banco de España, para que las cajas de ahorro gallegas apoyen la financiación de la economía gallega”.

Asimismo, se mostró partidario de que los gobiernos intervengan ya en la economía, pero no para mantener el principio básico del neoliberalismo de que el Estado no es la solución, sino el problema, y señaló que tanto el Gobierno de la Xunta, “presidido por el señor Feijóo, como el del Estado, del señor Zapatero, están presentando las mismas líneas de inversión, lo que significa que no hay diferencia entre las propuestas del PP y del PSOE para salir de la crisis”.

Consideró que ambas propuestas son sólo “paliativas” y reiteró que es necesaria una redistribución de la riqueza -“que pague más el que más tiene o gana”-, y por ello, durante el turno de preguntas indicó que el Bloque Nacionalista Galego, a la vista de estas propuestas, está lejos de dar su apoyo a las propuestas económicas socialistas, “porque no servirán para acabar con el desempleo galopante”.

Agregó que, si bien los 11.000 millones que se han consignado para atender al desempleo y los 400 millones que deben compensar “el raquítico inicio de la Ley de Dependencia” eran necesarios, “no hay ni un euro más para atender nuevos derechos sociales”.