En el citado encuentro informativo organizado en Barcelona por Nueva Economía Fórum, Forcadell explicó que considera que una audiencia con el Rey era “una muy buena oportunidad para explicarle la situación de Cataluña, la pluralidad de nuestro Parlamento”.
 
Para la presidenta del Parlament, era “una muy buena oportunidad para que supiera de primera mano cómo está la situación: que hay unos grupos mayoritarios con un objetivo muy claro que es avanzar hacia la independencia de Cataluña, pero que también hay mucha pluralidad y diversidad”.
 
“Creo que se perdió una oportunidad”, sentenció. A pesar de ello, Forcadell admitió que “el Rey está en todo su derecho a no recibirme”.

Forcadell se comprometió a respetar la “riqueza” de la pluralidad de ideas que hay en la cámara parlamentaria. En este sentido dijo que “el pluralismo se respeta con hechos” y ha recordado que una de sus primeras decisiones como presidenta del Parlamento fue la de que todos los grupos parlamentarios pudieran asistir a las reuniones de la Mesa. La presidenta también explicó que mantiene reuniones mensuales con los presidentes de los grupos parlamentarios para garantizar una comunicación fluida y directa.

Así, Forcadell también dijo que “tenemos que ser rigurosos y creativos” para dar respuesta a una legislatura que “avanzará en un contexto cambiante”. “Tenemos muchos retos encima de la mesa, como parlamento y como país”, afirmó.

EL “GRAN VIAJE” DE CATALUÑA
Por su parte, el expresidente del Parlamento Ernest Benach, que fue el encargado de presentar Carme Forcadell en el acto, dijo que “Cataluña ha iniciado un gran viaje, un viaje que será largo y complicado pero que cuenta con una buena tripulación”. Benach considera que “ya no se pueden resolver los problemas de la sociedad con los parámetros de siempre” e insistió que “el diálogo y el pacto forman parte de nuestra manera de ser –de los catalanes- pero también de nuestra voluntad de ser”. En el foro de hoy había casi todo el gobierno en pleno que tuvieron que levantarse a media conferencia porque tenían cita con el presidente Carles Puigdemont en la reunión de gobierno del martes.