En este acto informativo, organizado por Nueva Economía Fórum, bin Ali respondió así a una pregunta sobre la actuación de EEUU tras el ataque de Israel a la conocida como “Flotilla de la Libertad”, una acción que tachó de “lamentable y desafortunada”.

Asimismo, advirtió que “nada va a ayudar a la paz en la zona si como sociedad no tenemos en cuenta que los palestinos no tienen nada con qué vivir y están sufriendo”.

“Cualquier cosa que va contra la humanidad es malo”, apostilló bin Ali, quien agregó que esto también es aplicable con el radicalismo islamista.

Por ello, aseguró que Omán está contra el radicalismo islamista y destacó que “es un país liberal que no tiene ningún problema con la religión”. “Tenemos iglesias, templos, mezquitas e hindúes y todo el mundo tiene la libertad de seguir su religión”, agregó bin Ali, quien aseguró que “si tuviéramos judíos, les permitiríamos tener sinagogas”.

Por otro lado, se refirió al reciente acuerdo entre Irán, Brasil y Turquía para el control de la industria nuclear en el país del Golfo Pérsico. Para bin Ali, dicho acuerdo es muy importante “porque nadie quiere armas nucleares en el golfo, igual que no las queremos en Israel, India o Pakistán y esperamos que todo esto se pare lo antes posible”.

Por último recordó que Omán, que es uno de los pocos países con buenas relaciones con Irán y EEUU, se define como “amigo de todos y enemigo de nadie” y concluyó que “esperamos quedar así para siempre”.