Maragall, cuya intervención fue presentada por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, empezó por afirmar que los verbos a utilizar son "unir" y "respetar" y explicó que la reforma del Estatut pretende clarificar "las competencias de la Generalitat" y fijar las bases de un sistema de financiación que "corrija el desequilibrio contrario a Catalunya". "Queremos pagar en proporción a nuestra renta, el 19 por ciento, y recibir en función de nuestra población, 16 por ciento. Ni más ni menos", remachó. Insistió en que quieren un Estatut que reafirme su voluntad de ser considerados Estado pero aclaró que cuando dice Estado se refiere "a Estado español" que reconozca "efectivamente" su "pluralidad nacional y su diversidad cultural y lingüistica".

COMUNIDADES NACIONALES
No se trata de un "órdago", pero sí dejó claro que su propuesta pretende la organización "federal" del Estado español e insistió en la fórmula ?comunidades nacionales", en referencia a Cataluña, País Vasco y Galicia y a "la foral de Navarra". Fue en este punto en el que expresó su confianza en que se modifique y "cualifique" el artículo 2 de la Constitución. Posteriormente, en el coloquio que siguió a su discurso, afirmó que se deberían incluir en la Carta Magna los nombres de las 17 autonomías, y no sólo eso "si no que se les denomine".Para Maragall, la reforma del Senado tiene "mucho que ver" con todo este proceso y consideró "casi imprescindible" que tenga un carácter "federal".
Por otro lado, quiso disipar "malentendidos" y afirmó que uno de ellos es el que "opone igualdad a diversidad". "Esta posición --argumentó-- constituye una seria confusión. Es un error, porque lo contrario de la diversdiad no es la igualdad, sino la uniformidad. Y a la uniformidad sí que me opongo".

Rechazó "la desigualdad y los privilegios", pero matizó que igualdad es "partir de unos mismos derechos y competencias" y citó el caso de Estados Unidos. "No encontrarán mayor diversidad --afirmó-- de la que existe entre sus Estados: en los impuestos, el sistema educativo, la organización local, incluso en cuestiones como la existencia de la pena de muerte". En este sentido, pidió que no se utilice la igualdad para negar la "diversidad, la libertad y la autonomía"

FINANCIACIÓN
Por otro lado, exigió una revisión "a fondo" del sistema de financiación y el cambio del mapa político y físico del país para que se adecúe a la realidad. "Hay que pasar de una España entendida como una gran área metropolitana de Madrid, a una España concebida como una red" que significa "la adecuación de las estructuras económicas a criterios de eficiencia, de demanda potencial, de complementariedades, y de masas críticas que necesitan respuesta en el nuevo marco europeo". En este contexto situó la Euroregión y también mencionó los territorios de la Corona de Aragón y se preguntó si en una Europa Unida que va a votar una Constitución nos tendremos que replantear qué somos. Así, aludió a los vínculos con Aragón y Baleares en materias como infraestructuras y logística, cultura y lengua.

NO HAY UN ?PLAN MARAGALL?
A su vez, Maragall se desmarcó el plan soberanista del lehendakari y sostuvo que en Cataluña no habrá un ?plan Maragall?. El camino elegido por la Generalitat es lo que llamó "la vía catalana" siguiendo el procedimiento que la Constitución y el actual Estatuto establecen. La reforma, subrayó, deberá ser aprobada como mínimo "por una mayoría de dos tercios del Parlament", con el "concurso" de la oposición. Ya en el coloquio, argumentó que el Plan Ibarretxe "está hecho en primera persona" y que "más que explicar lo que quiere el País Vasco, dice lo que el País Vasco quiere" y, además, se sitúa "fuera del marco" de su estatuto de autonomía. Explicó que, históricamente, Euskadi siempre ha sido una "excepción española" y que España siempre ha considerado que se podía aceptar el "privilegio" en el sentido "técnico", como el el caso del concierto del País Vasco y el fuero navarro.

La Constitución, dijo, deroga leyes del siglo XIX y agregó que en el País Vasco existe la "conciencia" de que "se está en la misma situación que a principios del XIX". Desveló que cuando le pregunta a Ibarretxe por la situación de Euskadi, siempre le dice que los vascos "no iban a la mili" y que "no pagaban impuestos" y "siguen sin hacerlo", añadió Maragall. Todo esto, puntualizó, Castilla "lo ha aceptado de forma natural", mientras que en Cataluña es distinto.

NO MEDIARÁ ANTE IBARRETXE
Por otro lado, aseguró que la Generalitat no tiene "la llave de nada" en el proceso vasco y que no ofreció a Paxti López ningún tipo de mediación ante Ibarretxe. "No va a haber ningún tipo de mediación catalana", aseguró, al tiempo que deseó la buena marcha de las cosas en el País Vasco. Maragall consideró "frívolas" las voces que auguran una "balkanización" de España y consideró que Europa está en condiciones de admitir que existan Estados "con nacionalidades".