Navarro indicó que sólo la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil detectó el año pasado 102.000 positivos de conductores que superaron el límite en la tasa de alcoholemia.

Además, apuntó que los agentes de la Guardia Civil abrieron 17.000 diligencias por delitos relacionados con el alto consumo de alcohol al volante.

Por otro lado, Navarro destacó la implantación del permiso por puntos y recordó que unos 15.000 conductores pierden su carné por haber agotado todos los puntos, lo que equivale al 0,06% del censo de automovilistas.

”Los accidentes de tráfico son una enfermedad grave. No hay tratamiento indoloro. Hay que tomar medidas y ésta ha sido una medida estratégica”, añadió.

Navarro recalcó que otros países, como Portugal, Chile y Perú, “están copiando el modelo español del permiso por puntos”, por ser “extraordinariamente pedagógico”.

Además, aseguró que España contaba con 128 fallecidos por accidente de tráfico por cada millón de habitantes en 2003, cuando la media de la UE era de 105, y el permiso por puntos, explicó, ha posibilitado bajar esta cifra en España a los 68 fallecidos por cada millón de personas el año pasado.

Después del permiso por puntos, la reforma del Código Penal y el cambio en el modelo sancionador de la ley de tráfico, Navarro apuntó como prioridades de la Dirección General de Tráfico (DGT) las ciudades y la aplicación de la cultura de seguridad vial en las empresas.