“Hay que buscar alternativas y en eso las renovables son muy importantes ya que, aunque la nuclear también lo es, tiene problemas con sus residuos”, prosiguió bin Ali, quien no descartó que el Sultanato pueda subvencionar la producción de energías renovables tal y como se hace ahora en Europa.

“Las energías solar y eólica son muy caras ahora, admitió bin Ali, quien sin embargo defendió que “este es el momento en que las compañías españolas deberían venir a Omán”.

Por otro lado, señaló que hay otras oportunidades para las empresas españolas en sectores como las infraestructuras, el agua, la vivienda, las TIC, la atención sanitaria, el turismo, los alimentos o la educación. A este respecto, destacó que Omán importa el 80% de lo que consume.

En cuanto al turismo, indicó que Omán ha aprobado recientemente varias medidas para promocionar este sector, como la autorización para que los extranjeros puedan comprar tierras en ese país. Además, destacó que hay actualmente proyectos turísticos por importe de 2.000 millones de dólares.

También tiene prevista una importante expansión ferroviaria en cuatro fases. La primera consiste en una línea de 1.400 kilómetros que atravesará el país de norte a sur. Después prevé construir otras líneas que le unirán con Abu Dhabi, Arabia Saudí, Qatar, Bahrein y Yemen.

Con todo ello, Omán quiere reducir su dependencia del petróleo y el gas, recursos que ahora representan el 40% de su PIB y que quiere rebajar al 19% en 2020. En 2009, el Sultanato creció un 3%, pese a la caída del precio del crudo. En 2010 prevé crecer un 6%.