El candidato por Vizcaya dijo que otro de los objetivos de esta reforma sería "reforzar la separación de poderes, para que jueces y fiscales no actúen como delegados de los partidos políticos".

También defiende que el Tribunal Constitucional pase de 12 a 15 magistrados. Los tres nuevos serían elegidos por el CGPJ y la elección del fiscal general del Estado requeriría una mayoría de tres quintos.

Maura apostó por el sistema de listas abiertas para conseguir "un sistema electoral más representativo y conseguir instituciones más transparentes y más respetuosas con la democracia". Afirmó que esto es necesario para "no tener que elegir entre una izquierda y una derecha sectarias y antiguas, que son incapaces de entenderse para defender los intereses comunes de los ciudadanos".

RECUPERAR COMPETENCIAS

Para el candidato de UPyD, uno de los principales objetivos de la reforma constitucional sería "recuperar por parte del Estado las competencias en materia de educación, sanidad, cooperación exterior, planificación territorial y recursos naturales y medioambientales".
 

Otra de las propuestas del nuevo partido es la supresión de la disposición adicional primera, "que consagra los derechos históricos forales", y que desaparezca las distinción entre nacionalidades y regiones, "ya que toda la organización del Estado se produce en base a la idea de comunidades autónomas".

Asimismo, UPyD propone suprimir el artículo 3.3, que declara las lenguas cooficiales objeto de especial respeto y protección, porque "favorece la imposición y la discriminación lingüísticas".
 

El artículo 16, sobre la libertad religiosa, sería otro de los artículos a modificar, sustituyéndolo por otro que establezca que "ninguna confesión tendrá carácter estatal", ya que "nuestro partido se reivindica como un partido laico".