El líder nacionalista afirmó también que "nuestra apuesta por el soberanismo no pretende excluir al PNV", aunque "a veces sus líderes jueguen al victimismo. No les vamos a esperar indefinidamente".

En este sentido, el presidente de EA cree que el PNV "no va a contribuir a corto plazo al cambio que necesita Euskal Herria, porque está cómodo en la gestión institucional".

PNV-PSE
Además, puso en duda la "supuesta polarización PNV-PSE" y consideró que estos dos partidos "comparten los mismos intereses y a partir del 2 de marzo (tras las elecciones del día 1) van a seguir en el Gobierno vasco; con coalición de gobierno o sin ella, van a gobernar juntos".

Ziarreta quiso dejar claro que "EA no va a gobernar con el PSE", ya que "niega nuestra identidad nacional", y opinó que tras el discurso del líder de los socialistas vascos se esconde la premisa de que "algo debe cambiar para que todo siga igual". Además, afirmó que el discurso de Patxi López "está agotado" y ha sustituido "la ideología" por "la "fraseología".

El político nacionalista le recomendó que "cuando plantea soluciones económicas, se las diga a Solbes, que buena falta parece que les hace", y manifestó que el papel de López es el de "un delegado del Gobierno de Madrid".

"Patxi López hará aquí lo que cada momento Rodríguez Zapatero diga; ese es el margen de maniobra que tienen los socialistas vascos", añadió Unai Ziarreta, que calificó al líder socialista vasco de "candidato con mando a distancia".

Durante su intervención, Ziarreta también criticó la política de Zapatero y su Gobierno y opinó que "tienen pánico a la política y a que quienes aspiramos a vivir en un país independiente y soberano en Europa seamos capaces de poner en marcha un movimiento soberanista democrático que pueda concitar el apoyo de la mayoría social y política del país".