La titular de Ciencia e Innovación aseguró que espera que la ley se apruebe a principios de 2010, “pues hay consenso en el Gobierno”, y comentó que éste “será un año recordado por la promulgación de una ley que da respuestas a demandas seculares del mundo investigador”.

Entre otras medidas, la norma establecerá la autonomía en la financiación para la ciencia y supondrá el reconocimiento de un marco legal específico para la carrera investigadora.

Asimismo, recoge incentivos fiscales para la transferencia de conocimiento y plantea una modificación en la Ley de Mecenazgo, a fin de facilitar la inversión en I+D+i por parte de la empresa.

Con todo, Garmendia reconoció que España todavía tiene mucho que avanzar en el ámbito de la innovación, y esto es algo que la ley no puede satisfacer por sí sola, admitió.

De ahí la Estrategia Estatal de Innovación, declaró la ministra, que comprende cinco ejes fundamentales: desarrollar entornos financieros proclives a la innovación, promover mercados innovadores, apoyar la internacionalización, difundir los avances en innovación a todo el tejido social y promover el talento del personal investigador.

Según Garmendia, “el desarrollo de un sistema financiero apropiado es fundamental para romper la dependencia de la I+D del sector público”. “Por ello, estamos ultimando un convenio para involucrar a las tres principales entidades bancarias del país en Innocredit”, aseguró, a fin de facilitar financiación a aquellas empresas que quieran invertir en I+D+i.