En el citado encuentro informativo, organizado en Madrid por el Nueva Economía Fórum, Sanz se consideró un ferviente defensor del Estado de las autonomías, pero dejó claro que no está ni estará “con quienes pretendan romper el espíritu de la transición o cuestionan el modelo constitucional a través de la reforma de los estatutos de autonomía”.

En su opinión, tenemos un modelo territorial “con algunas imperfecciones que convendría superar”, pero “suficientemente bien estructurado”. Por eso, comentó, cualquier proyecto de reforma estatutaria “ha de tener una alta exigencia constitucional y una especial dependencia de las reglas políticas que hicieron posible la transición”.

Asimismo, consideró que “últimamente se ha tensionado excesivamente y de manera poco afortunada al Alto Tribunal”, en referencia al Tribunal Constitucional, y reiteró que “los estatutos están subordinados a la Constitución y así han de ser interpretados”.

Sobre la Justicia, Miguel Sanz apostó por acabar con la politización y modernizar la Administración de Justicia.